CGT denuncia la empecinada estrategia de los partidos políticos en Chiapas

...en el período de tiempo que la Caravana de Observación, Solidaridad y Apoyo internacional anda su camino por tierra del EZLN para precisamente dar fe al mundo de que en territorio zapatista el autogobierno genera la vida más digna que puede darse...

Denuncias fechadas el 9 de agosto desde la JBG de Morelia, y del 15 de agosto por parte de la JBG de La Realidad, nos indican ambas con lujo de detalles (como es en efecto nombrar a todos los agresores con nombre y apellidos, tanto a los jefes de los operativos como a sus bases) una serie de acciones que tienen como fin amedrentar a los compas bases de apoyo zapatistas para que dejasen de defender su convicción de que la tierra recuperada en el ’94 les corresponde en igual medida que es irrebatible que estamos enraizados en la tierra, pues formamos una unidad con el ecosistema indisoluble.

Concretamente estas denuncias refieren que, en el caso de la JBG de Morelia, del 2 al 8 de agosto la organización paramilitar ORCAO ha ido incrementando su presencia y pretendida confrontación directa en el ejido de Moisés y Gandi, región che Guevara, municipio autónomo en rebeldía Lucio Cabañas, zona zots choja, a base de mostrar armas de fuego y utilizarlas a escasos metros de distancia contra los miembros zapatistas que trabajaban la tierra. Más allá de tal repugnante agresión no han dudado en rociar con herbicidas las inmediaciones en especial el potrero colectivo. El 26 de julio en el nuevo poblado Carmen, se dedicaron también miembros de la ORCAO a fumigar 2 hectáreas de potrero con herbicida. Aún no siendo tan impactante como disparar, el hecho de fumigar propaga la idea de acabar con la Vida que han venido generando con su trabajo las bases de apoyo, sus autores quieren que produzca un angustioso sentimiento de fatalidad y efecto psicológico de siembra de muerte, de desvanecimiento de lo que tanto ha costado de alzar.

Por su parte entre los días 6 y 11 de agosto, la JBG de La Realidad denuncia que las autoridades (partidos verde ecologista (PVEM) y PRD) y un grupo de personas de Veracruz anexo del ejido San Carlos municipio oficial de las margaritas han elaborado he iniciado una estrategia para apropiarse de la bodega que los bases de apoyo zapatistas trabajan en colectivo. Con tal fin han llegado a dirigirse a la JBG para reclamar su uso reivindicando dos futuros proyectos prometidos por los (des)gobiernos oficiales, han puesto alambre de púas a la puerta de la bodega, he incluso han cortado el suministro de energía eléctrica tanto de la bodega como en la propiedad de un compa base de apoyo, Mario Santis Méndez.

Como siempre es necesario ver qué hay más allá de los hechos sucedidos, quién manda que se ejecuten tales hechos. La respuesta siempre es la misma, aquellos que se dedican a dividir a la gente en beneficio propio y en representación de oscuros intereses. Estos criminales para organizarse son quienes forman los partidos políticos, que a eso se dedican, a dividir, muy profesionalmente, a la población. Tal y como se visualizó mediante una patética teatralización en las recientes elecciones institucionales en Chiapas, tanto Juan Sabines Guerrero (PRD) como Manuel Velasco Coello (PVEM) que resulta ser el próximo gobernador represor, se entienden a la perfección cuando se trata de administrar su negocio, pues su política no es otra cosa, un ruin negocio de destrucción y muerte, por supuesto, a mayor gloria del capitalismo.

Desde la CGT nos hacemos eco de las denuncias efectuadas por las JBG en el período de tiempo que la Caravana de Observación, Solidaridad y Apoyo internacional anda su camino por tierra del EZLN para precisamente dar fe al mundo de que en territorio zapatista el autogobierno genera la vida más digna que puede darse, a la vez que genera la envidia e ira de aquellos que pretenden someter a la población a sus despóticos anhelos de mal entendido poder.

¡Alto a las agresiones y a la guerra contra las Comunidades Zapatistas!
¡Libertad a Francisco Sántiz López!
¡Viva el EZLN!
¡Viva el CNI!