Conselleria redujo también la duración de los contratos de los conductores que efectúan labores de vigilancia.
CGT, además de recordar las reivindicaciones del sindicato para el colectivo de brigadistas rurales de emergencias como son : incremento de la dotación de medios para la extinción de incendios forestales, contrataciones mínimas de nueve meses, formación, mejora de los obsoletos equipos de protección, seguridad en los vehículos disminución de la distancia entre las unidades y mantenimiento sostenido de la masa forestal, denuncia la decisión de Conselleria de acabar con la vigilancia nocturna en los picos del País Valenciano, tarea correspondiente a la empresa Vaersa. Esta medida fue aplicada a principios de la campaña de verano de este año.
Otra decisión nefasta fue reducir 1,5 meses la duración de los contratos correspondientes a los conductores que realizan las labores de vigilancia y apoyo.
Así, la política del ejecutivo valenciano en materia de prevención y extinción de incendios ha estado encaminada desde hace años a disminuir costes, tal y como ha venido denunciando reiteradamente la Confederació General del Treball. Pero, sólo cuando las pavorosas consecuencias de los incendios se hacen irremediables el Consell reacciona públicamente prometiendo repoblaciones y, en ningún caso, dando marcha atrás a su filosofía de precarizar y relegar a un segundo plano las inversiones para salvaguardar la importante riqueza forestal de la Comunidad.
De esta manera, la mayor parte de los picos han quedado desprotegidos todo este verano durante la noche ya que las jornadas nocturnas quedaron eliminadas y una sola persona realiza la vigilancia diurna.
Asimismo, la escasez de medios en los retenes es cada vez mayor y enfrentar fuegos simultáneos, como es el caso en estos últimos días, es tarea imposible.
Gabinete de Prensa CGT-PV
Valencia, 10 septiembre 2010
Fuente: CGT-PV