A pesar de la gravedad de la oleada de incendios forestales del año en curso, con ejemplos significativos como el del El Tejado-Puente del Congosto, en donde no sólo se perdió masa forestal, sino, aún más importante, se puso en riesgo la integridad de la población civil, la Junta de castilla y León ha decidido desmantelar el operativo de prevención y extinción de incendios forestales en la provincia de Salamanca a partir del jueves 19 de octubre. Esta misma semana, el lunes 16, se declaró otro incendio de proporciones considerables entre las localidades de Pereña y Villarino de los Aires, que obligó a la Junta a declarar el nivel 2 de peligrosidad, dentro de un máximo de 3.
Aun cuando se prevé un cambio pasajero en las condiciones meteorológicas para estos días, el alargamiento de la temporada estival ha sido un hecho constatable, con temperaturas veraniegas en pleno mes de Octubre que, lejos de ser una anécdota, evidencian de forma clara el cambio climático. No sería de extrañar que se produjese otra ola de calor en lo que queda de año, situación que provocaría un incremento del nivel de peligro de incendios forestales.
Aun cuando se prevé un cambio pasajero en las condiciones meteorológicas para estos días, el alargamiento de la temporada estival ha sido un hecho constatable, con temperaturas veraniegas en pleno mes de Octubre que, lejos de ser una anécdota, evidencian de forma clara el cambio climático. No sería de extrañar que se produjese otra ola de calor en lo que queda de año, situación que provocaría un incremento del nivel de peligro de incendios forestales.
Los medios propios de la Junta de Castilla y León, compuestos por personal Fijo-discontinuo, se componen de 11 autobombas y 13 torres de vigilancia, ocupados por trabajadores a los que en la mayoría de los casos sólo se les activa por un periodo de tres meses. A partir del día 19, sólo quedarán operativas hasta el mes de Diciembre 2 de las 11 autobombas, en las localidades de Candelario y Serradilla del Arroyo. El resto de la provincia, en especial Arribes, el Rebollar la Sierra de Francia, quedan totalmente desprotegidas.
Desde CGT no se entiende cómo las autoridades de la Junta no mantienen el operativo durante la totalidad del año, ya que no se trata solamente de un operativo de extinción, sino, lo que es más importante, un operativo de prevención. Gran parte de los incendios forestales que se producen en época estival se evitarían, o cuando menos, serían más controlables y su alcance se vería enormemente reducido, si durante el resto del año se llevasen a cabo las labores de mantenimiento y desbroce de las masas forestales, utilizando para ello los medios personales del personal Fijo-discontinuo.
Esta forma de gestión, es la que , por ejemplo, está utilizando la Junta de Extremadura, manteniendo el operativo activo durante todo el año, desarrollando labores auxiliares, y optimizando de esta manera los recursos propios.
Desde CGT exigimos a la Junta de Castilla y León que mantenga el operativo de prevención y extinción de incendios forestales en la provincia de Salamanca, dando estabilidad a un colectivo de trabajadores (fijos-discontinuos) que año tras año demuestran su profesionalidad e implicación en la defensa del patrimonio forestal, siendo los que, en última instancia, hacen posible que se minimicen los efectos de los incendios que, desgraciadamente, van en aumento año tras año.
Por lo público, por lo común.
Sección Sindical de CGT en la Junta de Castilla y León
Fuente: Sección Sindical de CGT en la Junta de Castilla y León