A la nueva adjudicación del servicio de atención telefónica de los Centros de Información y Coordinación de Urgencias que se ha saldado con despidos improcedentes y un empeoramiento de las condiciones laborales, hay que añadir el impago del mes de septiembre por parte de Meta 10, la anterior contrata. La Conselleria de Sanidad tiene conocimiento puntual de todo ello.
Hace un mes inició su actividad como contrata de Sanidad y en substitución de Meta 10, Unitono, filial de la multinacional de Trabajo Temporal Randstad. Tal y como informó CGT, la nueva adjudicación supuso un flagrante empeoramiento de las condiciones de trabajo (se reemplazó el Convenio de aplicación de Oficinas y Despachos por el de Telemarketing) y además se hizo contraviniendo la legislación laboral al no reconocer en la subrogación lo que eran despidos (y por tanto no se hicieron efectivos los pagos correspondientes) y al excluir de la nueva contrata a 11 trabajadores con contrato indefinido, uno de ellos delegado de CGT.
Estos hechos han sido denunciados judicialmente por CGT-PV que reclama se declare la improcedencia de los despidos y, por tanto, la readmisión o indemnización de los afectados.
Además, y para colmo de atropellos contra los derechos de los trabajadores, ninguno ha percibido aún la nómina del último mes que trabajaron para Meta 10. A pesar de los esfuerzos por reclamar el abono de la nómina de septiembre, todo ha sido infructuoso hasta el extremo de que, en los últimos días, la comunicación con la empresa se ha hecho imposible : nadie responde a las llamadas telefónicas de los empleados.
Por último, cabe destacar que en este momento, sólo en Valencia, la plantilla se ha reducido en cinco personas lo que sin duda merma en calidad el servicio de atención de urgencias extrahospitalarias de la Comunidad Valenciana.
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Fuente: Gabinete de Prensa CGT-PV
