CGT no va a permitir que las empresas Renfe y Adif sean vendidas a precio de saldo
CGT convocó huelga para el próximo 5 de diciembre con tiempo suficiente para permitir el diálogo entre empresa y trabajadores, comunicando el paro con la necesaria antelación para que se pudiera dar un periodo de diálogo que desembocara en un acuerdo satisfactorio de las partes y evitar así un periodo de huelga que en definitiva, representa el fracaso de la negociación.
CGT convocó huelga para el próximo 5 de diciembre con tiempo suficiente para permitir el diálogo entre empresa y trabajadores, comunicando el paro con la necesaria antelación para que se pudiera dar un periodo de diálogo que desembocara en un acuerdo satisfactorio de las partes y evitar así un periodo de huelga que en definitiva, representa el fracaso de la negociación.
Ha pasado el tiempo y ni la empresa ni el Ministerio han trabajado nada ni generado ningún tipo de diálogo, manteniendo una postura inamovible, inconsciente e impropia de los más elementales principios en las relaciones laborales.
Ni para CGT ni los trabajadores, no valen las excusas ministeriales de periodo político en el que nos encontramos, pues a diario vemos como el máximo responsable del mismo (ministro) viaja, se reúne, toma y firma acuerdos. En definitiva, mantiene una actividad normal, lo que nos lleva a pensar que las empresas ferroviarias y la conflictividad presente le importa «tres pepinos». Una actitud impropia de un cargo electo de carácter público.
Por su parte, la dirección de la empresa mantiene sus ritmos de trabajo, obviando también la conflictividad que tiene encima y que tiene la obligación de atajar con los elementos a su disposición.
CGT no va a tolerar esta desgana y pasotismo de empresa y ministerio, por lo que hemos convocado, además de la jornada de paro del día 5, otra nueva jornada de paro de 23 horas para el día 20 de diciembre.
No podemos quedarnos quietos en RENFE, cuando el futuro que pretenden es vender a l@s ferroviari@s y la empresa a precio de saldo, cuando siguen negándonos el derecho a la promoción interna integral, cuando limitan y recortan salarios mientras anuncian beneficios millonarios, cuando nos conducen al desarraigo con el aumento de las permanencias en los puestos de trabajo, cuando la reducción de la jornada la aplican de acuerdo a criterios economicistas y no al cumplimiento de los objetivos de la ley en cuanto a conciliación familiar y laboral.
No podemos quedarnos quietos en ADIF, cuando el futuro que pretenden es vender a l@s ferroviari@s y la empresa a precio de saldo, cuando siguen privatizando todos los sectores productivos, cuando se incumplen de manera sistemática los acuerdos alcanzados, cuando los distintos planes de empleo no recogen las necesidades productivas reales.
Por éstas y otras muchas razones más, seguiremos demandando lo que en derecho y trabajo diario nos pertenece. Porque la razón de cada uno de nosotr@s tiene más valor que cualquier mayoría sindical, de la que tenemos que lamentar su inacción y vergonzante puesta de perfil ante una privatización de los servicios públicos que avanza bajo un gobierno que se dice socialista pero que aplica el neoliberalismo al más puro estilo de la derecha capitalista.
Reseñar en el ámbito de Valladolid, el apoyo que se está dando a una demanda de rebaja de las tarifas para los trenes Avant a Madrid, queriendo justificar un desplazamiento diario de 300 km como servicios de Cercanías, que en plena Semana del Clima se anuncie el apoyo del gobierno municipal del Ayuntamiento de Valladolid a este planteamiento nos parece una desfachatez, aunque sea en tren eléctrico, está claro que todo vale para intentar justificar los miles de millones del #AVEderroche despilfarrados en plena crisis, que en realidad fue una estafa a la sociedad y la Alta Velocidad contribuyó a ello, encima, ahora pretenden que esa inversión pública sea para beneficio de empresas privadas, arrancando a la ciudadanía un beneficio que si hay tal, debería revertir sin que nadie se lo lleve a costa de precariedad laboral y aprovechándose de lo público. Contra la venta de lo público a precio de saldo nos movilizamos el 5 y 20 de diciembre.
Alta Velocidad que se vendía como beneficio para Valladolid y resulta que hemos bajado de 300.000 habitantes, que el hotel de 5 estrellas que se estrenó con el AVE cerró de forma estrepitosa, aunque el lado bueno es que ahora es un espacio autogestionado y qué pasará con el chiringuito de Adif en la «Estación Gourmet» otro gran negocio quebrado a la sombra del AVE.
En vez de un apoyo a unas «Cercanías a 300 km» mejor sería que cumplieran la promesa electoral de quienes ahora gobiernan en el Ayuntamiento y en La Moncloa, implantando las Cercanías entre Palencia y Medina del Campo, facilitando la movilidad en la zona, para el asentamiento de personas y empresas, de tal forma que en vez que haya que ir a Madrid a trabajar, vengan de Madrid aquí.
El freno al Cambio Climático vendrá de la mano de un mayor uso del tren, tanto para viajeros como para mercancías, pero no si se sigue con el apoyo exclusivo a la alta velocidad.
Sección Sindical del Sector Ferroviario de CGT en Valladolid
Fuente: SFF-CGT Valladolid