La trascendencia de la emisión de cuotas participativas para el futuro de las Cajas de Ahorro (pocas son ya las personas que dudan aún, que es primer paso para la desaparición de las entidades de ahorro) y su repercusión directa, ya sea sobre el colectivo de personas que trabajamos en ellas o de los y las clientes que gestionamos, nos obliga a posicionarnos en contra de su emisión y a reflexionar detenidamente sobre este asunto.
Lo que era extraño es que aún no se hubiera atacado al modelo de las Cajas, donde la influencia y control del capital no es tan directo. El modelo de las Cajas no cuaja dentro del modelo económico global neo-liberal, que no entiende de otra cosa que no sean intereses privados y, en consecuencia, rechaza toda manifestación de solidaridad social.
La globalización que nos interesa como ciudadano y ciudadanas es la de una sociedad solidaria donde la concepción actual de las cajas, en tanto que productoras de obra benéfico-social, se debe defender y potenciar, incluyendo conceptos y finalidades más modernas : banca ética, ecología, solidaridad, etc.
Potenciar las Cajas tal y como son ahora, significa también posicionarse contra la emisión de las cuotas participativas en el sector de ahorro, reflexionando sobre :
¿QUE SON LAS CUOTAS PARTICIPATIVAS ?
El real decreto 302/2004 establece :
¿NECESITAN LAS CAJAS UN INSTRUMENTO COMO ÉSTE ?
ESTÁ CLARO QUE NO
Se ha dicho que las cuotas son un instrumento para mejorar y crecer con solvencia y eficacia. La realidad de las cajas es que han crecido en clientes, oficinas y recursos gestionados mucho más que los bancos, y además presentan mejores ratios de rentabilidad, sin necesidad de cotizar en el mercado ni de tener ánimo de lucro.
Si los bancos entran en el capital de las cajas habrán conseguido no solo participar de los beneficios, sino también controlar y regular a un competidor muy importante. Si las cuotas participativas son un instrumento que mejorará la buena gestión de las cajas, ¿por qué no se ha quejado ninguno de los banqueros/as de nuestro país ? ¿NO SERÁ QUE CON ESTA MEDIDA VAN A RECUPERAR DESDE LOS DESPACHOS LO QUE HAN PERDIDO EN EL MERCADO ? No debemos permitir que la situación financiera actual nos impulse a tapar un roto con un descosido.
La dirección de la CAM , en su vertiginosa carrera por el liderazgo del sector, no atiende más razones que las que le impulsan a la obtención del máximo beneficio, olvidándose de los territorios origen de la Entidad, de sus trabajadores/as ( 100 % representación de la plantilla en contra de la salida a bolsa), de la sociedad en general en la que se ha apoyado para llegar a su posición actual
No podemos terminar sin reflexionar sobre nuestra posición sobre la situación de asedio que padecen las cajas por parte de los poderes políticos y la banca. Las cuotas participativas sólo pueden llevarnos a la privatización de las entidades de ahorro y a un mayor control de los poderes económicos representados por la gran banca. Una vez más hemos de insistir en explicar y transmitir con claridad a la sociedad, la obra social que realizan las cajas como gran diferencia respecto a los bancos : nuestra contribución al desarrollo de territorios locales desde el punto de vista económico, social y cultural.
En estos momentos que las cajas padecen presiones para convertirse en sociedades anónimas, debemos de mantener una postura fuerte para que entre todos y todas seamos capaces de hacer frente a los intereses económicos y políticos que pretender hacerse con el control de las cajas y eliminar su función social.
Fuente: Ventura López. Secretario General CGT-CAM