La respuesta de la empresa a la comunicación de constitución de la sección sindical de CGT en Autobuses Rico, no se ha hecho esperar y ha procedido a despedir a varios de los miembros de CGT en la empresa.

Esta torpe actuación empresarial no va a conseguir eliminar los deseos de cambio en la plantilla de la empresa, que está cansada de la sumisión de los Sindicatos UGT-CCOO y la falta de respaldo que vienen padeciendo desde hace años, que supone que la empresa los someta a condiciones laborales inferiores a las mínimas establecidas en las Normas Laborales, a unas condiciones paupérrimas en materia de jornada-descansos y a una política de Prevención de Riesgos Laborales inexistente.

Esta torpe actuación empresarial no va a conseguir eliminar los deseos de cambio en la plantilla de la empresa, que está cansada de la sumisión de los Sindicatos UGT-CCOO y la falta de respaldo que vienen padeciendo desde hace años, que supone que la empresa los someta a condiciones laborales inferiores a las mínimas establecidas en las Normas Laborales, a unas condiciones paupérrimas en materia de jornada-descansos y a una política de Prevención de Riesgos Laborales inexistente.

Esta Empresa, que supuestamente recibe tratos de favor en la concesión de servicios por parte de la Diputación Provincial de Cádiz, al formar parte de ella un hermano del dueño de Autobuses Rico, tiene que aprender a afrontar que sus trabajadores hayan cambiado de opción sindical y desde el respeto a las Normas dotar a sus trabajadores de los derechos básicos en materia de contratación, jornada, económica, sindical y de Prevención de Riesgos, en el caso contrario se estará sumergiendo en un conflicto laboral que no cesará hasta que se cumplan las expectativas mínimas de los trabajadores y, por supuesto, se readmita a los despedidos.