CÁDIZ. La práctica totalidad de los trabajadores que tenían que cubrir el turno de fin de semana en la factoría de Delphi en Puerto Real no acudió ayer a la fábrica en respuesta a la convocatoria realizada por el comité de empresa.
El acto de protesta obedecía a la denuncia formulada por los representantes de los operarios que aseguran que la empresa se ha dirigido, sin contar con el comité, a varios empleados y les ha ofrecido la posibilidad de que se desvinculen de la compañía de automoción a través de bajas incentivadas.
Este hecho ha indignado a los sindicalistas, que no se explican cómo la dirección de Delphi actúa de forma unilateral cuando ni siquiera se ha negociado un plan industrial para los próximos años que debe recoger, entre otras cuestiones, el número de operarios que formarán parte de la plantilla.
Así, el seguimiento de la convocatoria del comité para que los trabajadores no acudieran ayer a la factoría fue del cien por cien, aseguró a este periódico Isidro Jiménez, integrante de CGT y miembro del órgano de representación laboral de la planta puertorrealeña.
Jiménez explicó que los únicos que sí entraron ayer en la fábrica fueron trabajadores pertenecientes a la sección de mantenimiento «por razones de funcionamiento de la planta, pero el resto de empleados no acudió y respaldó la propuesta del comité», apuntó.
La medida de presión tenía como objetivo «conseguir que la empresa se siente a negociar por derecho y que se entere de que no puede hacer las cosas de manera unilateral sin contar con el comité», subrayó Jiménez.
El próximo contacto entre la dirección y el comité será el martes. «Esperamos que las cosas se encaucen, porque la plantilla quiere que sea el comité el que negocie y no que la empresa actúe individualmente con los trabajadores», añadió el representante sindical.
Diario de Cádiz