El sindicato CGT muestra su apoyo a todas aquellas familias que han manifestado su desacuerdo con la pruebas de evaluación externa de Educación Primaria programadas para los próximos días de mayo.

Son ya muchas las comunidades autónomas que han manifestado su negativa a la realización de las pruebas y muchas las organizaciones que han manifestado su rechazo.

Son ya muchas las comunidades autónomas que han manifestado su negativa a la realización de las pruebas y muchas las organizaciones que han manifestado su rechazo. Unas pruebas que conllevan una evaluación descontextualizada, evalúan contenidos concretos y no competencias, someten a los alumnos a un estrés innecesario, no atienden a la diversidad y convierte a los centros en academias de preparación para las mismas, quitando importancia a la evaluación continua y al esfuerzo diario que hacen los niños y niñas por aprender, por no hablar del gasto económico que dichos exámenes externos suponen.

Este curso, ya somos conocedores que la no realización de la prueba de 3º de Primaria el año pasado, no tuvo ninguna repercusión para los alumnos, ni las familias que objetaron a su realización. En contra, de las posibles medidas de refuerzo a los centros donde se detectaron resultados negativos, no supuso ninguna dotación a mayores de recursos y sí un aumento de la burocracia en planes estandarizados. Hecho que con anterioridad a estas “revalidas” ya se ponían en marcha en los centros, sustentados en la evaluación continua que en ellos se realizaba por parte de sus maestros y maestras, en colaboración con los equipos de orientación y entrevistas con las familias, que son los que verdaderamente conocen a esos niños y niñas.

Si la voluntad de estas pruebas es mejorar el proceso de enseñanza, esta claro que como hemos argumentado, en la de 3º no tienen beneficios constatables y la de 6º de Primaria llega tarde, ya que es el final de la etapa en la educación Primaria, con lo cual no revertirán sobre ellos las supuestas ayudas y su orientación para la Educación Secundaria, aspecto que ya se venia haciendo entre el profesorado de los centros (Instituto-Colegio).

Creemos que esas mejoras tienen que venir motivadas por la cooperación con la comunidad escolar durante toda la escolaridad y no impuestas por las Administración. Este modelo de evaluación eliminaría factores claves para el aprendizaje, defendidos por las metodologías escolares puestas en marcha por muchos de nuestros centros, basadas en Comunidades de Aprendizaje, Grupos Interactivos, Educación Emocional, Inteligencias Múltiples…en las que priman el crecimiento del individuo, las interacciones, la participación de la comunidad, la atención a la diversidad y la convivencia.

Por todos estos motivos, CGT muestra su total apoyo a las familias y hace un llamamiento a los centros para que se respete la voluntad de las mismas a la objeción a la prueba.

Jesús Monte Acebes

Secretario General de Organización

Sección Sindical de la Junta de Castilla y León – EDUCACIÓN

 


Fuente: Sección Sindical de la Junta de Castilla y León –Educación-CGT