CGT afirma que no quiere desprestigiar al sector del transporte de viajeros en autobús por carretera y que con su petición e incremento de inspecciones por parte de la Guardia Civil de Tráfico sólo quuiere denunciar las conductas infractoras. CGT sale así al paso de las declaraciones vertidas ayer por el presidente de la patronal del transporte en autobús, Fadabus, Alfonso Caravaca, quien acusó a CGT de «desprestigiar» al sector y negando la existencia de problemas de seguridad vial en los vehículos.
CGT señala que con la denuncia por infracciones de la Seguridad Vial ha dado en el talón de Aquiles y parece que tienen miedo a que la Guardia Civil inspeccione como debe los autobuses, cuando no debería tener ningún tipo de miedo si no tuvieran nada que ocultar y fueran con la verdad por delante.
La intención de CGT no es la de desprestigiar al transporte por carretera de viajeros sino reducir y denunciar las conductas infractoras para mejorar la competencia entre empresas del sector y reportar beneficios al sector y aquellas que no tengan tales conductas se ven perjudicadas por las que sí infringen la ley.
Frente a la consideración de la patronal Fandabus de que CGT es un sindicato «minoritario», la central recordó que «en Damas Sevilla y Almonte es el único que hay y somos mayoritarios en Renfe en Andalucía y el tercer sindicato en España».
Para CGT los empresarios del transporte de viajeros por carretera dejan en evidencia sus pocos argumentos para rebatir el conflicto, pues no queremos hablar de ser más o menos representativos, sino de una mayor seguridad en el transporte por carretera de viajeros.
CGT no quiere propaganda y los conflictos en empresas como Damas los movieron los trabajadores, no los sindicatos.
Asímismo se señala que «no pedimos el apoyo de la Junta, sino que el Gobierno andaluz haga Justicia, pues todo lo demás es entrar en amiguismos y salirse del círculo de la Justicia».
Rojo y Negro