La compañera Miriam Pérez lleva 28 días en huelga de hambre, luchando por su derecho a una vida digna. Despedida con un ERE del sindicato UGT en el que trabajaba desde hacía 15 años, tras reclamar en los juzgados y a punto de engrosar las filas de las personas excluídas, tomó la decisión de utilizar su cuerpo como herramienta de lucha frente a la injusticia que supone el despido y el camino inevitable hacia la pobreza para ella y su hija. 

Para el Sindicato Único de CGT en Tenerife se trata de una lucha justa y ejemplar, como la de cualquier persona que decida luchar por sus derechos enfrentándose a la empresa que la despide, por lo que respondiendo a su petición de apoyo, desde un primer momento hemos estado a su lado y participado en las acciones, ruedas de prensa y acompañándola en la acampada. 

Para el Sindicato Único de CGT en Tenerife se trata de una lucha justa y ejemplar, como la de cualquier persona que decida luchar por sus derechos enfrentándose a la empresa que la despide, por lo que respondiendo a su petición de apoyo, desde un primer momento hemos estado a su lado y participado en las acciones, ruedas de prensa y acompañándola en la acampada. 

A estas alturas (después de 4 semanas sin comer) se trata, ante todo, de una cuestión humanitaria, del más elemental apoyo mutuo entre colectivos y personas que luchan juntas desde abajo, pero también de denuncia hacia un sindicato, en este caso UGT, que aplica ERE’s y despidos a sus plantillas en aplicación de legislaciones que ellos mismos han denunciado públicamente y que en ocasiones, como en las últimas huelgas generales, les ha llevado a pedir desde sus cúpulas la movilización unitaria de la clase trabajadora en contra de estas políticas antisociales que nos llevan al paro y la exclusión.

Continuamos sin entender la actitud de la ejecutiva regional de esta organización sindical que se niega a negociar con su extrabajadora, a pesar del deterioro manifiesto de la salud de Miriam, a pesar del respaldo que ha recibido su lucha desde los más diversos ámbitos. Esto nos indigna y, lo que es más grave para CGT, cuestiona desde la base misma los procesos de unidad sindical y de los movimientos sociales ahora en marcha. 

Lo cierto es que la huelga de hambre de Miriam está resultando fuente de conflicto para colectivos y organizaciones, pues como en el caso de Rosi Cubas que estuvo 23 días de huelga de hambre en defensa de la sanidad pública, se mezclan simpatías y antipatías, cuestiones personales, intereses contrarios, estrategias… cuestiones secundarias según pensamos algunas personas y colectivos cuando se trata de alguien que opta por la huelga de hambre para resistir. Un tema que nadie dudaría en apoyar si el empresario fuera una constructora o si únicamente se responsabilizara al gobierno de turno de la situación en sanidad, pero que parece un problema insalvable cuando es UGT quien despide o cuando se cuestiona el conformismo de algunas personas que trabajan en los servicios públicos. 

En estos momentos complicados, es importante saber en quién puedes confiar, quién realmente está a tu lado en la lucha. Rosi y Miriam son dos ejemplos dentro del goteo constante de conflictos con rostro humano y como en otras ocasiones CGT se queda aislada dentro del mundo del sindicalismo alternativo en Tenerife. Contamos con los apoyos de los colectivos con los que hemos trabajado en estos últimos años, una red que día a día crece, pero parece imposible avanzar en procesos unitarios con organizaciones que no han sabido estar a la altura de las circunstancias. 

En esta situación de emergencia social (en este análisis todas parecemos coincidir) nuevas coordinadoras, movimientos ciudadanos, plataformas y asambleas populares vienen abriéndose camino… aunque utilicen métodos de trabajar y organizarse que no compartamos ni nos sirvan cuando más lo necesitamos. No obstante en CGT entendemos que los procesos unitarios son imprescindibles, siempre que estos partan de las de abajo, desde la horizontalidad y el apoyo mutuo. 

salud 

Secretariado Permanente de CGT-Tenerife, La Laguna a 8 de abril de 2013