« Crónica de una muerte anunciada » Urgencia humanitaria en Chile: la situación de los jóvenes en prisión preventiva

El 18 de octubre de 2019, el pueblo chileno se levantó en una gran ola de manifestaciones para exigirle al gobierno que se hiciera cargo de la catastrófica situación económica y social en la que se encuentra sumergido el 95% de la población en Chile. En vez de escuchar a los ciudadanos y poner en marcha la indispensable modificación del modelo económico, el gobierno respondió aumentando y exacerbando las medidas represivas.

El 18 de octubre de 2019, el pueblo chileno se levantó en una gran ola de manifestaciones para exigirle al gobierno que se hiciera cargo de la catastrófica situación económica y social en la que se encuentra sumergido el 95% de la población en Chile. En vez de escuchar a los ciudadanos y poner en marcha la indispensable modificación del modelo económico, el gobierno respondió aumentando y exacerbando las medidas represivas.

En este marco, 2.500 jóvenes (entre ellos una cantidad aún no determinada de menores) se encuentran hoy en día en “prisión preventiva” (medida punitiva que en Chile puede extenderse hasta dos años) sin que haya habido proceso ni condena en su contra, y por actos cuyo carácter delictivo es, en la mayoría de los casos, discutible e incluso inexistente.

Tras una campaña de apadrinamiento de estos presos de la revuelta social en Chile, organizada por la Asociación de ex presos políticos chilenos en Francia, nosotros, ciudadanos chilenos y franceses habitantes de este último país, decidimos fundar un Colectivo de Madrinas y Padrinos.

Como tales, queremos hoy lanzar un llamado de alerta a la comunidad internacional en torno a la dramática situación en la que se encuentran estos jóvenes presos, y en torno a los riesgos a los que están expuestos en la coyuntura de la pandemia del Covid-19. Los numerosos testimonios que hemos recibido por parte de las familias de estas personas describen condiciones sanitarias catastróficas: hacinamiento, falta de higiene, intimidación y aislamiento respecto a sus parientes en el exterior. Estas familias, desesperadas por la restricción de las visitas, están poniendo en riesgo su propia seguridad para tratar de hacerles llegar a los presos máscaras y gel hidroalcohólico. A todo ello se suma el hecho de que, como en muchas otras cárceles del mundo –Francia, Colombia–, en Chile los motines se han multiplicado, fragilizando aún más la situación de estos jóvenes contra los cuales no existe ninguna acusación documentada.

Hasta ahora, las autoridades chilenas han hecho oídos sordos a los llamados humanitarios lanzados por las familias, por sus abogados y por los colectivos de apoyo.

Es por eso que, como portavoces en el extranjero de estas diferentes instancias frente a la opinión internacional, nosotros, Madrinas y Padrinos, solicitamos la conmutación, por razones humanitarias, de la “prisión preventiva” por el “arresto domiciliario”, con el objetivo de que estos jóvenes puedan beneficiar de los cuidados de su familia, evitando así una hecatombe inminente.

Te invitamos a apoyar esta solicitud, firmando la carta abierta.

¡En este período de pandemia, contamos contigo, y con tu solidaridad!

Colectivo de Madrinas y Padrinos en Francia de lxs presxs de la revuelta social en Chile

http://www.laboursolidarity.org/Carta-abierta-a-las-autoridades


Fuente: Red Sindical Internacional de Solidaridad y de Luchas