El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, ha confirmado que en el accidente laboral ocurrido en Burgos el pasado enero -en el que fallecieron 10 trabajadores y dos resultaron heridos graves- "fallaron todas las medidas de prevención y de gestión de la prevención", tanto los de la empresa como los ajenos.

El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, ha confirmado que en el accidente laboral ocurrido en Burgos el pasado enero -en el que fallecieron 10 trabajadores y dos resultaron heridos graves- «fallaron todas las medidas de prevención y de gestión de la prevención», tanto los de la empresa como los ajenos.

En su comparecencia ante la Comisión de Empleo y Asuntos Sociales del Congreso de los Diputados, Caldera dijo que ese accidente -uno de los más graves de los últimos 25 años en número de muertos- «ha puesto de manifiesto que el problema está en la falta de prevención» y que ese día hubo «un claro fracaso de todas las políticas preventivas».

A la espera de que la auditoría ofrezca aspectos más precisos, explicó el ministro, «la conclusión global» es que en Burgos fallaron «todos los sistemas de prevención y de gestión de la prevención».

De hecho, según Caldera, en la investigación ya se han «constatado transgresiones de seguridad» concretas por parte de la empresa, de la constructora y del promotor y que se consideran «acciones de las más graves que hay tipificadas en el derecho sancionador», y que ahora la Inspección de Trabajo debe evaluar.

Posteriormente, la de Castilla y León tendrá la responsabilidad de imponer sanciones «acorde con los hechos», informó Caldera.

No obstante, el ministro, quien comenzó su comparecencia recordando a los heridos y a las víctimas del siniestro, manifestó que este accidente debe servir para que se apliquen las medidas de prevención y se refuercen todas las actuaciones pero no para «llevarnos al pesimismo más absoluto» porque «esta batalla se puede ganar si perseveramos y actuamos en la dirección adecuada».


Par : EFE