En el lunes 29 de septiembre la Cámara de los Diputados de Estados Unidos rechazó al proyecto de ayuda del sistema financiero por 228 a 205 votos. El paquete del presidente George Bush Jr., del secretario del Tesoro Henry Paulon, del ex-ejecutivo del petróleo y hombre de confianza de Nixon y Gerald Ford Dick Cheney y del substituto de la herencia de Alan Greenspan, el presidente del Fed (Federal Reserve, Banco Central de los EEUU) fue negado por mayoría de políticos del Partido Republicano. Es correcto que las maniobras parlamentarias y el juego del tipo corrida de los cerdos a la comida (pork barrel según los politólogos estadunidenses) debe terminar por volcar el juego a favor de la administración Neo Conservadora del hijo de Bush Padre.
La posible explicación para la primera derrota del gobierno es el rechazo del electorado. Una variable explicativa válida es el hecho de que el paquete es impopular. Como el sistema de allá es distrital, eso permite que el elector llame para el gabinete del diputado y cobra directamente el parlamentario de su distrito. Eso llevó la presión por el voto contrario. Pero, con el aumento del seguro de los ahorros y cuentas privadas – que pasaron a ser garantizadas cuentas no solamente US$ 100 mil, pero hasta US$ 250 mil dólares – y la fábrica de salchichas de cualquier parlamento, sumada a la presiones de los opinólogos, economistas de corte neoliberal, periodistas “dichos especializados” es probable que la farra venida del contribuyente de los EUA, aumentando la deuda pública interna y cuya cuenta pagaremos el mundo todo, debe ser aprobado. El pacto de élites aprobó, en los bastidores, el paquete de salva vidas de los corsarios de las finanzas y siendo que en Senado el proyecto de US$ 700 mil millones. El acuerdo para el paquete de salvación fue apoyado por los candidatos a presidente, pues tanto Barack Obama como John McCain votaron a favor en Senado.
Lo que poca gente, aún en el campo de las izquierdas de corte marxista más lúcido, se olvidó de decir es que la variable crimen organizado es un factor que genera la aventura financiera y los fraudes seguidos. Ya estamos acostumbrados a escuchar locuras de tipo profético como “ !el capitalismo si va a matar a si mismo !”. Este tipo de absurdo no es raro. Tengo la costumbre de decir que si tengo duda, la gente pregunta para la derecha más ideológica y ella misma sabrá dar las respuestas desnudas y crudas para la limpieza de su campo de actuación. El esquema del préstamo de hipotecas sin fin teniendo por base datos falsos o poco confiables sumada a una larga suma de moneda digital podrida es un simple y directo robo. Es muy semejante al escándalo de 1987, cuando llevó al quiebre del Saving & Loan’s (cajas de ahorro). El operador central de la estafa esa fue Charles Humphrey Keating Jr., cabeza visible de la mafia de cuello blanco que quebró el ahorro de los EUA y que terminó siendo salva por la intervención promovida por el entonces presidente Ronald Reagan. Conocido como una medida de “Reaganomics”, el ex-galán de Hollywood autorizó la ejecución del rescate de las instituciones financieras aplicando dinero público.
Esta hipótesis parte de fuente especializada y cuyo centro nervioso es la comunidad de informaciones del Estado francés. En el jueves 25 de septiembre el periódico La Vanguardia (Barcelona, Región Autonómica de la Catalunya, Estado Español) presenta en suya contra tapa una autoridad policial. La entrevista hecha por el reportero Lluís Miguet, es con un comisario divisional (equivalente al puesto de coronel) de la Direction de La Surveillance du Territoire (DST, agencia de contra espionaje francés), subordinada al Ministerio del Interior. El especialista, Jean-François Gayraud, es el único mando del órgano autorizado a dar entrevistas y es autor de un libro acerca de la geopolítica de la macro criminalidad financiera (El G-9 de las Mafias del Mundo). Jean-François es el encargado del órgano para combates a crímenes económicos.
Él presenta una tesis bastante razonable, cuya semejanza con el fraude de 1987 está en el modus operandi. Afirma Jean-François que un banco puede equivocarse en hasta 10% de los préstamos, pero no en miles de ellos. Eso por sí sólo ya caracteriza gestión temeraria. Partiendo de esa premisa el fraude se inicia a través del tráfico de influencia. Para ocupar puestos-llave en “bancos de inversión”, entran en acción contactos políticos de 1º, 2º y 3º escalón. Estos operadores ocupan cargos de mando y autoridad en una institución financiera, controlando las operaciones de crédito y riesgo. Después de, personas de confianza se conceden montantes gigantescos de préstamos, sin garantía real. La forma de aumentar la burbuja especulativa es a través de la industria inmobiliaria. Ejemplos de casos pertinentes de la especulación y aumento de metro cuadrado de forma absurda ya ocurrieron también en la costa de Marbella en el territorio del Estado Español ; de la presencia de la Camorra y del Banco de Vaticano como fomentador inmobiliario ; de la venta de apartamentos y terrenos para gringos del Panamá ; de la desnacionalización del territorio uruguayo, de entre otros “agujeros negros” de la especulación del suelo urbano y urbanizado global.
Volviendo al modus operandi de la mafia del Sub Prime, mafia esta compuesta por parte de la élite de los EUA, la operación pasaba por contratos con constructores, fomento para la construcción, correctores. Simultáneamente, operarios públicos y privados aprueban los créditos podridos avalizados por empresas de análisis de riesgo que corroboran la aventura financiera. Un ejemplo absurdo es lo de la empresa “de análisis de riesgo” Standard & Poors, que como centro de excelencia de estafador no consiguió identificar a suspensión de pagos inminente del Banco de Inversión Lehman Brothers. Este “banco” por señal tuvo parte de sus hombres de 2º escalón prendidos por el FBI. Esta “empresa” especializada afirma no haber percibido de la suspensión de pagos inminente y del fraude de los balances de Cualquier semejanza con la burbuja inmobiliaria japonesa del final de la década de ’80 no es ninguna coincidencia. El raciocinio del comisario François apunta esa cadena de eventos como un método recurrente. Y acuerda que el candidato republicano, el senador John McCain era conocido como uno de los “Keating’s Five” ; o sea, uno de los cinco senadores de confianza del “inversor” Charles Keating ofreciendo “blindaje y apoyo” económico.
Esto también es verificable en el libro «McMáfia, crimen sin fronteras» (edición brasileña de la Cia de las Letras, 2008) del periodista conservador inglés Misha Glenny. No podemos confundirnos entre el posicionamiento político y precisión de datos y la honestidad de la información. El libro de Glenny es una obra-prima para la lectura de las mafias de la globalización y se hay discordancia es en la solución presentada (más ley, más Estado, pretensa regulación, supuesta neutralidad estatal) y no en las críticas y análisis del problema. El eje de la investigación de Misha Glenny apunta el nexo político-criminal como forma esencial de acumulación privada.
Vean lo que este periodista inglés constató cuando del estouro de la crisis inmobiliaria de los EUA ya en 2007 :
“A mediados de 2007, el colapso del mercado inmobiliario de alto riesgo señaló al mundo cuanto esa estructura se parece con un castillo de cartas. Cuando decenas de miles de estadounidenses con capacidad dudosa de pago ya no podían aguantar los intereses crecientes de sus hipotecas y dejaron de honrarlas, instituciones financieras de todo el mundo sintieron el baque. Los bancos céntricos de Europa comunitaria, Japón, Australia y el Fed (EUA) pusieron más de US$ 150 mil millones de dólares de los contribuyentes en los mercados globales para impedir una crisis aún mayor. Es decir más o menos lo que los contribuyentes de la Unión Europea pagan todo año para los fraudes de tipo tiovivo”.
Traduciendo, es así que se roba y se practica el crimen de tipo fraude financiero, como una forma de crimen sin víctimas físicas. En esta modalidad, que es hija directa de la liberalización del flujo entre mercados financieros, quienes sufren es el dinero del contribuyente. El rombo siempre es pagado desplazando los recursos de toda una sociedad. Esos recursos desviados, o sea, el espacio del agujero de moneda digital que tiene que ser cubierta por nosotros mismos, escurre para los llamados “paraísos fiscales”, como las Islas Cayman, las Islas Vírgenes Británicas, Aruba, la plaza financiera uruguaya, en la Isla de Jersey, en el principado de Luxemburgo de entre otras cloacas sanitarias que drenan los recursos de tipo financiero en todo el mundo.
Tanto el periodista inglés Misha Glenny como el comisario de la DST francesa Jean-François Gayraud concuerdan con la solución de tipo institucional. Para ambos especialistas, la solución lógica sería un pacto entre los Estados desarrollados y sus gobiernos de turno, y tomar la decisión de cerrar los “paraísos-cloacas” financieros del mundo. Porque se no tiene lastro material el dinero, es para ahí que corre el dinero financiero desviado de las sociedades concretas que lo generaron. Pero eso es simplemente inviable de parte de los gobiernos, una vez que el sistema financiero es parte del arreglo de dominio de la globalización y esos agujeros sin fin son estratégicos para el capitalismo de tipo globalizado. Sin el ralo del agoto financiero, las plazas bancarias tendrán que quemarse, como hube con la plaza Suiza, tal es el caso del Banco UBS y del Credit Suisse, flagrados actuando como agiota de cualquier zona baja de una gran ciudad.
Es preciso comprender la naturaleza de tipo criminal, aventurera, insana y absurda de los reyes del casino financiero global. No hay ningún pudor de esa gente en robar sus propios accionistas en un balance, quebrar un país o extinguir los recursos de una sociedad entera. La “crisis del capitalismo” como los profetas del apocalipse quieren en los hacer creer – y así repiten lo que nos dice el FMI – fue uno exagero en la roubalheira y la quiebra total de los límites de riesgo moral (moral hazard) al operar las finanzas del país más poderoso del mundo. La saña fue tamaña que la base de apoyo de Bush Jr. puede ser el mayor verdugo del modelo NeoCon de gobernar.
Para salvar las finanzas bancarias, llaman la solución de la mano derecha del Estado y de los bloques económicos. Estos operan de forma coordinada, reproduciendo en escala mundial lo que hicieron en Chile de Pinochet. Allá se vivió la armonía del fascismo financiero, operando un palo de hube arado y una calculadora financiera. Ahora, en la era digital, el Estadio Nacional de Santiago se localiza en centros de horror como Guantánamo ; y gente de la calandra de los Chicago Boys ya no son la minoría como eran en la primera mitad de la década de ’70, pero hegemonía del pensamiento capitalista, gobernando los destinos de las riquezas de la humanidad desde el Casino de Wall Street.
BL Rocha es politólogo y periodista, militante de la Federación Anarquista Gaúcha (FAG : www.vemelhoenegro.org/fag).
Fuente: Bruno Lima Rocha, politólogo y militante anarquista de la FAG
