Los enawene nawe, una tribu aislada de la Amazonia brasileña, saltó la semana pasada a los titulares de la televisión nacional británica, en un contundente informe sobre la deforestación de su tierra ante las plantaciones de soja.
El informe, aparecido en los informativos de mediodía, de tarde y de noche de la cadena ITV del pasado miércoles 8 de marzo, coincidió con el primer día de la visita de estado del presidente Lula da Silva al Reino Unido. «Hace sólo 30 años estos indígenas tuvieron su primer contacto con el mundo exterior», declaró el editor científico de ITV Lawrence McGinty desde el campo de pesca de los enawene nawe. «Toda su existencia está hoy amenazada por este contacto».
Para otras tribus aisladas, es ya demasiado tarde. En el estado de Rondônia, la tribu akuntsu se ha reducido a seis personas, mientras que otro hombre solitario es considerado el último superviviente de su tribu. Traumatizado por sus experiencias, vive actualmente en un agujero lanzando flechas a todo el que se acerca.
La tierra de los indígenas enawene nawe en el estado de Mato Grosso está siendo deforestada rápidamente para destinarla a plantaciones de soja y a la cría de ganado. El gobernador del estado de Mato Grosso y barón de la soja Blairo Maggi, uno de los mayores productores de soja del mundo, planea construir presas hidroeléctricas en su tierra para proveer de energía a la industria de la soja. Maggi está presionando al gobierno federal para que no se reconozcan más territorios indígenas en su estado.
El líder enawene nawe, Marikeroseene declaró a ITV : «En los dos últimos años, la deforestación ha aumentado espectacularmente. Se ha duplicado. La situación es insostenible».
España, segundo importador europeo de soja, importa unas 6.000 toneladas de soja anualmente. De estas, 1.600 toneladas corresponden a haba de soja de Brasil (67% del haba total importada) y 600 toneladas son harina de soja brasileña (18%), según datos publicados por Eurostat.
El director de Survival, Stephen Corry, ha declarado : «La deforestación en la Amazonia amenaza a algunas de las tribus brasileñas más vulnerables, incluyendo a la mayoría de las no contactadas. El pleno reconocimiento legal de su tierra es la clave para su futuro y debería ser realizado sin más dilación».
Fuente: sourvival