El presidente de la Coordinadora de Asociaciones Solidarias con el Sáhara, José Taboada, ha advertido contra la posibilidad de que el pueblo saharaui «se convierta en moneda de cambio» en las negociaciones sobre política de inmigración que se están llevando a cabo con Marruecos, además de expresar su «indignación» por el «chantaje humanitario a España y la Unión Europea» que en su opinión está llevando a cabo el país vecino por este motivo.
Taboada participó este fin de semana en la concentración que distintos colectivos celebraron en Madrid para reclamar a los Gobiernos de España y Marruecos que se respeten los Derechos Humanos en las repatriaciones de ciudadanos subsaharianos y ha expresado su preocupación porque “no ya el Gobierno, sino la comunidad internacional en su conjunto, pueda caer en las trampas que Marruecos siempre ha querido tenderles”.
El presidente de CEAS-Sáhara ha destacado que, a pocas semanas de que el Consejo de Seguridad de la ONU vuelva a emitir un informe sobre su Misión en el territorio, “Marruecos ha vuelto a mostrar al mundo su faz más cruel e inhumana,” añadiendo que «es indignante que personas con la formación jurídica de Miguel Ángel Moratinos y la vicepresidenta del Gobierno hayan podido decir que Marruecos respeta los Derechos Humanos, porque todos hemos podido ver estos días como a esta gente se la deja en mitad del desierto pasando hambre y sed».
«Llevamos ya al menos once muertos en las últimas semanas por la actuación de Marruecos, desde la Cumbre de Sevilla no han hecho más que burlarse de España», ha agregado Taboada.
El dirigente de CEAS-Sáhara también ha expresado su «profunda decepción» por los resultados de dicho encuentro Hispano-Marroquí en relación con el pueblo saharaui, pues «no parece que el presidente del Gobierno se mojara lo más mínimo en favor de los activistas detenidos o para que Marruecos cumpla con las resoluciones de la ONU, sino más bien todo lo contrario».
«Sentimos mucho la política que este Gobierno está llevando a cabo con el Sáhara, y nos consta que muchos simpatizantes y votantes socialistas que participan en nuestras asociaciones no la comparten en absoluto», ha señalado Taboada.
ORIGEN DE LA INMIGRACION
En relación al problema de la inmigración ilegal desde los países del África subsahariana, el presidente de CEAS- Sáhara ha subrayado que «su origen está en la mala distribución de la riqueza y en la mala descolonización que Occidente efectuó en los años 60 en esos países».
«Y la solución no pasa por subir la altura de las vallas, sino por el desarrollo político y económico”, ha subrayado Taboada, “pero para eso es imprescindible una solución que respete el derecho a la autodeterminación de los saharauis, pues solo de esa manera habrá en el futuro garantías de paz y estabilidad en la zona», ha subrayado Taboada.
Por otro lado, y en relación con la posibilidad de que un grupo de subsaharianos sea dejado a su suerte junto al muro que separa los territorios ocupados por Marruecos de los liberados por el Frente Polisario, Taboada subrayó que «no es la primera vez que eso ocurre y que estas personas son acogidas en el territorio de la RASD».
HOSPITALIDAD SAHARAUI
«Si algo caracteriza a los saharauis es la hospitalidad, y los que viajamos a menudo a los campamentos lo sabemos bien», ha agregado Taboada.
Asimismo consideró que «un estado saharaui libre y soberano no generaría ningún tipo de problemas de inmigración a sus vecinos, pues el país cuenta enormes riquezas y la República Árabe Saharaui Democrática ya cuenta con una buena experiencia en los territorios libres y en los campamentos de refugiados”.
FOSAS COMUNES
El descubrimiento de fosas comunes de víctimas asesinadas en cárceles secretas marroquíes en Agdez, Kalat Maguna y Takunit, sabiendo que entre sus víctimas hay un grupo de saharauis, que fueron secuestrados por las autoridades marroquíes durante la invasión militar del Sáhara Occidental, el 31 de octubre de 1975, pone de manifiesto la política de exterminio colectivo que impuso Marruecos hace 30 años y que, hoy en día, sigue vigente contra el pueblo saharaui.
La declaración de la existencia de estas fosas comunes no es más que una afirmación y una prueba de la amarga realidad, que las autoridades marroquíes no han dejado de negar, como es la responsabilidad directa de Marruecos en la desaparición de más de 500 civiles saharauis y de 151 prisioneros de guerra que Marruecos mantiene aún. Dicho esto, el Gobierno saharaui exige la verdad, toda la verdad, respecto a estas víctimas en el plazo más breve.
Fuente: CEAS-Sahara