Diez agentes -casi la mitad de la unidad fiscal y aduanera de la Guardia Civil en el aeropuerto de Gando, en la isla de Gran Canaria- fueron detenidos ayer por sus propios compañeros en el desenlace de una operación que comenzó en marzo, ante la presunción de que los sospechosos cobraban elevadas sumas de dinero a ciudadanos extranjeros por agilizar u omitir trámites aduaneros con sus equipajes.
Los agentes detenidos permanecerán en los calabozos hasta su puesta a disposición judicial, acusados de delitos de cohecho, coacciones, blanqueo de capital, falsedad documental, hurto y omisión del deber de perseguir delitos, según confirmó anoche la Delegación del Gobierno en Canarias.
La investigación se inició a raíz de una denuncia formulada por un ciudadano extranjero en marzo pasado. Tras comprobar que la denuncia podía estar fundamentada en una actuación irregular de algunos agentes, sus superiores comunicaron sus sospechas al juez, que autorizó la operación de vigilancia. A partir de ese momento, y sin conocimiento de los agentes de esta unidad, se instaló un circuito de cámaras de vigilancia, camufladas en un falso techo, en la zona de trabajo de los policías.
El pasado 22 de agosto, dos agentes denunciaron la existencia de estas cámaras, que descubrieron cuando unos operarios pasaban por el falso techo un cable de antena de televisión. La denuncia se presentó en el Juzgado de Instrucción 6 de Telde, que decretó el secreto de sumario.
Según la investigación, los guardias civiles detenidos cobraron entre 1.000 y 2.000 euros a distintos ciudadanos magrebíes, coreanos y de diversos países de Asia. Aprovechando que no dominaban el idioma, les ofrecían agilizar u omitir los trámites de aduana en el control de equipajes o declaración de dinero para introducirlo en España.
Juan Puce, el portavoz de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), hizo anoche un llamamiento a la prudencia y a la presunción de inocencia de los compañeros detenidos. «En estos asuntos, hay que ser muy cautelosos y esperar a que termine la investigación en curso», fue lo único que declaró a este periódico.
El aeropuerto de Gran Canaria es uno de los que registran mayor tráfico aéreo de toda España. A la importante actividad derivada de la constante llegada y salida de turistas de Europa, se une un importante trasiego de ciudadanos africanos, con cuyos países Gran Canaria tradicionalmente ha mantenido conexión.
Fuente: J. M. PARDELLAS / J. NARANJO | EL PAIS