El equipo de gobierno de la izquierda transformadora no toma medidas

Unos sesenta trabajadores y trabajadoras de la brigada municipal de obras del ayuntamiento de Cerdanyola, realizan sus trabajos en un local con amianto, según informes del propio ayuntamiento y del Comité de Salud laboral, se constata que hay peligro para los trabajadores por la presencia del agente cancerigeno.

El riesgo se produce como consecuencia de las deficiencias que afectan al edificio del Carrer Camp Nº 56, propiedad del ayuntamiento de Cerdanyola,y que vienen siendo denunciadas desde hace años.

Unos sesenta trabajadores y trabajadoras de la brigada municipal de obras del ayuntamiento de Cerdanyola, realizan sus trabajos en un local con amianto, según informes del propio ayuntamiento y del Comité de Salud laboral, se constata que hay peligro para los trabajadores por la presencia del agente cancerigeno.

El riesgo se produce como consecuencia de las deficiencias que afectan al edificio del Carrer Camp Nº 56, propiedad del ayuntamiento de Cerdanyola,y que vienen siendo denunciadas desde hace años.

En concreto la degradación en la cubierta del edificio, se remonta al menos, al mes de octubre de 2015, tal como se recoge en el informe técnico “…l´estructura de ferro que suporta el sostre está patint una deterioració important tant amb els posibles perills que podría emportar..”

Los peligros descritos se referían a la proximidad de humedades a las instalaciones eléctricas. A pesar de le existencia de placas de fibrocemento en la cubierta, su posible peligrosidad no se evalúa, hasta tres años después en que, en fecha 23 de noviembre de 2018 el informe técnico emitido por el arquitecto técnico municipal recoge sin lugar a dudas los riesgos de exposición al amianto derivados de la degradación de las placas de fibrocemento.

El informe propone el traslado de la plantilla. El comité de seguridad acuerda por unanimidad, el día 11 de diciembre que se aborden las medidas preventivas antes de un mes, para que nadie siga expuesto al riesgo y se insta al traslado a un local adecuado.

A pesar de todo ello, a fecha 16 de enero de 2019 desde CGT desconocemos que se haya tomado medida alguna para salvaguardar la salud y la vida de los trabajadores. Mientras, la plantilla continúa trabajando en el local, prolongando de esa manera su exposición a un mineral cancérigeno, como es el amianto y que se viene dando ya durante demasiado tiempo.

CGT exigimos que se cierren las dependencias con amianto y que se reubique a la plantilla en un lugar que ir a trabajar no suponga jugarse la vida ni la salud. Es intolerable la pasividad de los politicos de la izquierda transformadora que gestionan el ayuntamiento.

Jose Luis Ortega

CGT-Administración Pública


Fuente: CGT-Administración Pública Barcelona