El Presidente de RENFE-Operadora, José Salgueiro, ha anunciado las líneas básicas del Plan Estratégico de la empresa ferroviaria para el periodo 2005-2009. Si el valido de la Ministra de Fomento no se ha vuelto a confundir al exponer este Plan, lo que cuenta es preocupante.

El Presidente de RENFE-Operadora, José Salgueiro, ha anunciado las líneas básicas del Plan Estratégico de la empresa ferroviaria para el periodo 2005-2009. Si el valido de la Ministra de Fomento no se ha vuelto a confundir al exponer este Plan, lo que cuenta es preocupante.

RENFE-Operadora pretende incrementar sus ingresos casi un 80%, a lo que hay que sumar una reducción de las aportaciones del estado en un 9% y una inversión de 5.500 millones de euros. La contrapartida sería un aumento del número de viajeros del 19% y la destrucción del 6’66% de la plantilla. Los datos no cuadran.

La plantilla de la que se quiere deshacer RENFE-Operadora consiste en 1.000 puestos de trabajo, repartidos a partes iguales entre las Unidades de Negocio de Mercancías (la mayor parte de los trabajadores son Maquinistas) y de Mantenimiento Integral de Trenes (Talleres). La empresa no tiene ya el personal suficiente para afrontar todas sus cargas de trabajo, un hecho que está utilizando permanentemente como excusa para externalizar numerosos servicios.

En cuanto al ADIF, que se encuentra en una situación similar de falta de plantilla, aunque aún no ha dado detalles, es previsible que pretenda llevar a cabo también un despido colectivo, que estaría probablemente centrado en puestos de trabajo relacionados con la seguridad (Mantenimiento de la Infraestructura y Circulación).

Si ya tienen problemas ambas empresas para asumir las actuales cargas de trabajo con una plantilla que se ha reducido drásticamente, ¿cómo piensan poner en marcha nuevos servicios disminuyendo aún más el número de trabajadores ?

Parece más un ejercicio de “contabilidad creativa” que un Plan posible. ¿De dónde va a salir el dinero para las inversiones si disminuyen las aportaciones del estado ? ¿De dónde los beneficios si los viajeros aumentan sólo la cuarta parte que los ingresos ? ¿Cómo va a aumentar el transporte de mercancías, supuesto objetivo de la Ley del Sector Ferroviario y del PEIT, reduciendo el número de maquinistas que transportan las mercancías ? ¿Cómo piensan mejorar el mantenimiento de los trenes cerrando y vaciando de personal los talleres ?

Las cuentas no salen. En los datos manejados por Salgueiro no parecen haberse tenido en cuenta las tarifas. ¿Por cuánto se tendrían que multiplicar para soportar este Plan ? Porque si algo parece claro es que la parte principal del Plan Estratégico la van a pagar los usuarios.

Claro que tampoco se menciona el Plan de Desinversiones previsto por RENFE-Operadora, un curioso recurso éste de vender el coche para pagar la gasolina, que supondrá un ingreso inicial y la reducción de ingresos a partir de ese momento. RENFE-Operadora pretende deshacerse de sus participaciones en empresas relacionadas con el transporte ferroviario para fomentar a sus competidores.

Parte de las inversiones que va a realizar RENFE-Operadora, 342 millones de euros, se va a destinar a “optimizar” las instalaciones de mantenimiento, para el tratamiento de los trenes de nueva adquisición, que junto con la reducción de 500 puestos de trabajo en este servicio y la práctica ya habitual de incluir en los contratos de compra de material su mantenimiento, sólo puede significar que estas inversiones públicas se van a utilizar en beneficio de las empresas privadas constructoras de material ferroviario.

Del Plan Estratégico 2005-2009 no ha sido informado el Comité General de Empresa de RENFE-Operadora, como tampoco lo ha sido del posible Contrato-Programa con el Estado, ni del previsto Expediente de despido colectivo, ni del citado Plan de Desinversiones. Algo que nos lleva a cuestionar nuevamente la transparencia y voluntad de diálogo de que presume la Ministra de Fomento, un talante tan transparente que es de hecho invisible.

En este sentido, debemos recordar que aún no ha contestado el Ministerio a las alegaciones que el día 18 de marzo presentaron numerosas organizaciones, entre ellas CGT, durante el proceso de información pública del PEIT ; al parecer, la única decisión al respecto que tomó Magdalena Álvarez fue la forzada destitución voluntaria del Director General de Infraestructuras, una forma de manejar el Ministerio que sin duda heredó de Álvarez-Cascos junto con el maletín ministerial.

Del mismo modo que no existe la menor transparencia en el modo de actuar del Ministerio, ésta es total en sus intenciones : su objetivo es privatizar el ferrocarril y proporcionar negocios a las grandes empresas constructoras de infraestructuras a costa de los fondos públicos.

La privatización del ferrocarril está en marcha, y la va a pagar el usuario y el ciudadano : van a pagar tanto los costes como las consecuencias.


Par : SFF-CGT


Madrid a 20 de mayo de 2005