Como estaba previsto, decenas de ciudadanos,
militantes de derechos humanos, militantes políticos
de la izquierda radical, periodistas…, han respondido
al llamamiento del Comité de Solidaridad con las
víctimas del incendio-crimen de ROSAMOR (creado el 29
de abril de 2008), y eso para homenajear
colectivamente a las víctimas.
La tienda de la conmemoración se ha levantado frente
al edificio/b cuyo incendio costó la vida a decenas de
obreras y de obreros. Los testimonios de los
supervivientes milagrosos y las familias de los
difuntos eran emocionantes, conmovedores,… nos
aprieta, nos revuelve las tripas, nos enrabia, nos
recuerda la existencia de las clases sociales, la
explotación de los unos por los otros, la necesidad de
comprometerse en las luchas sociales junto con los
productores, junto con la clase obrera.
El Estado intenta presentar como inocentes a sus
representantes locales, minimizar la responsabilidad
del patrón, crear cizaña entre las familias de las
víctimas (concediendo a algunas sí y a otras no
cheques de 50.000 dh., la Seguridad social ( CNSS) ha
enviado a una veintena de familias cheques de 10.000
dh)… Se arranca a los supervivientes «certificados»
sobre la santidad de Elhaj, dueño de la fábrica. Los
supervivientes y las familias de las víctimas son el
objeto de intimidaciones y otras presiones.
Los patronos del barrio industrial han pedido a los
«irregulares» desaparecer del mapa por algunos días
en espera de que la tormenta pase, sobre todo porque
los servicios públicas interesados van «a proceder» a
un «control general» (¡ ojo !) en las fábricas.
A fin de cuentas, se pone en marcha toda la clásica
máquina para que el crimen siga quedando impune
Fuente: PresseMaroc. Traducción : CGT
