Artículo de opinión de Joseba Amenedo Oñante, delegado de CGT en Adif
Los hechos a los que me voy a referir tuvieron lugar en junio.
Los hechos a los que me voy a referir tuvieron lugar en junio. Resumiendo lo acontecido, y sin entrar en detalles para no extenderme, lo que ocurrió fue que ante una queja de un usuario de Adif, en la estación de tren de Pamplona (no era un simple ciudadano de a pie) y su llamada a la policía municipal porque un empleado no le daba una hoja de reclamación, -hoja que no existe en las ventanillas-, se personaron unos agentes de la policía municipal con una actitud absolutamente chulesca, dando lugar a unas situaciones que si bien son inaceptables por parte de cualquier persona, cuando estamos hablando de agentes de la ley, son absolutamente condenables: allanamiento del espacio de la ventanilla, zarandeo del trabajador cuando este les conmina a que bajen el tono y esperar a que termine de atender a un cliente para hablar con ellos … Y como si estuvierámos hablando de tiempos pasados que debían haber quedado justamente ahí, en el pasado, la policía municipal, lejos de reconducir su comportamiento, le denuncia al trabajador por «falta de consideración a las fuerzas y grupos de seguridad en el ejercicio de sus funciones».
Este trabajador interpuso una denuncia en el juzgado, denuncia que fue archivada, y como el trabajador no la recurrió, la Concejalía Delegada de Seguridad Ciudadana y Convivencia del Excmo. Ayuntamiento de Pamplona, ha incoado un expediente sancionador a este trabajador por » falta de respeto y consideración a los agentes de la autoridad», como diría mi amiga Pepi, alucina pepinillos.
Francamente, nos extraña y nos indigna que esta Concejalía, en lugar de investigar unos hechos que pueden ser, a nuestro parecer, graves, opta por criminalizar a la persona agredida. Añadir que esta concejalía tenía conocimiento de la versión que el trabajador da de los hechos porque así se le había trasladado vía correo electrónico. Entendemos que unos hechos de este tipo requieren, por lo menos, una investigación seria. Porque no lo olvidemos, los agentes de la policía municipal, entre otras cosas, y entre otros colectivos municipales, son para la ciudadanía un reflejo de los principios y valores que prevalecen en el Ayuntamiento de Pamplona, Ayuntamiento que por lo visto no es de todos y de todas.
Porque aquí vemos que se sigue criminalizando al ciudadano, mientras que a los agentes de la autoridad se les presupone una conducta intachable. El ciudadano tiene que demostrar su inocencia y a los agentes municipales no se les hace ninguna investigación seria.
Esto es propio de otros tiempos, en los que la ciudadanía tenía diferentes tratamientos, y sufrían de diferente manera los rigores de los reglamentos en función del estatus o el lugar que ocuparan en la sociedad.
Esperamos y desearíamos pensar que efectivamente, estamos hablando de otros tiempos, y que la Concejalía delegada de Seguridad Ciudadana se retracte y abra una investigación antes de incoar un expediente a un ciudadano que presuntamente ha sido víctima de una abuso policial.
Reconocer y poner remedio a los errores que se dan en nuestra casa, lejos de debilitar al Gobierno Municipal, le dan credibilidad.
Joseba Amenedo Oñante
Fuente: Joseba Amenedo Oñante