El 6 de agosto de 1936 asesinaron a Ramón Acín fusilado en las tapias del cementerio por los fascistas.
Cuando tiempo más tarde fue exhumado su cadáver de la fosa común, en el bolsillo de su pijama (así estaba vestido cuando fueron a sacarlo de su casa) se encontraron unos lápices. Esas eran las armas de Acín, la cultura.
La Casa de Cultura de Ruesta lleva su nombre en homenaje a este hombre de la tierra, nacido en Huesca, y que es un referente para el anarcosincalismo.
Coincidiendo con la Escuela de Verano de Ruesta de 2021 hemos estrenado una exposición que recoge la biografía y los tres aspectos más destacados de su vida, a parte de como padre, que son su faceta artística, militante y de pedagogo.
Os invitamos a visitar Ruesta y conocer a Ramón Acín.
Fuente: Memoria Libertaria de la CGT
