Los participantes reclamaron la regularización de todos los extranjeros
Unas 5.000 personas se manifestaron ayer en el centro de Barcelona para pedir la "regularización incondicional de todos los inmigrantes sin papeles y reclamar la retirada de la ley de extranjería.

Los participantes reclamaron la regularización de todos los extranjeros

Unas 5.000 personas se manifestaron ayer en el centro de Barcelona para pedir la «regularización incondicional de todos los inmigrantes sin papeles y reclamar la retirada de la ley de extranjería.

La marcha, que transcurrió sin incidentes y en un ambiente festivo, había sido convocada con motivo de la jornada de lucha contra las leyes de extranjería por una treintena de asociaciones, entre ellas Papeles para Todos, colectivos de inmigrantes de diferentes países y los sindicatos CGT y CNT. La manifestación, que empezó en la plaza de la Universitat y acabó frente a la Delegación del Gobierno, se celebró simultáneamente —el mismo día— en 12 países europeos y en otras tres ciudades españolas, Málaga, Sevilla y Madrid.

Los participantes en la protesta distribuyeron un manifiesto en el que se exigía la regularización de todos los inmigrantes residentes en España, que actualmente «son obligados a trabajar en condiciones de semiesclavismo». El documento define Europa como «una fortaleza abierta al dinero de las multinacionales, pero restringida para las personas sometidas a las leyes de extranjería».

CENTROS DE INTERNAMIENTO

Según los convocantes, más de un millón de personas inmigrantes viven en España sin papeles y sin posibilidad de regularizar su situación, en un apartheid jurídico que les priva de los derechos sociales y políticos.

Norma Falconi, portavoz de Papeles para Todos, recordó que otra de las reivindicaciones de los manifestantes es el cierre «inmediato» de todos los centros de internamiento de Europa. Falcone dijo que son auténticas «cárceles» en las que «personas cuyo único delito es no haber regularizado su situación son sometidas a malos tratos y ven vulnerados sus derechos esenciales».

Falconi criticó «la propuesta de CCOO y SOS Racisme de regularizar la situación de los inmigrantes que tengan una oferta de trabajo, porque dijo que los extranjeros «trabajan principalmente en la economía sumergida». CCOO y SOS Racisme no participaron en la manifestación. «Sólo se han adherido al manifiesto», explicó Norma Falconi.

CRÍTICAS AL FÒRUM
Los manifestantes exhibieron pancartas críticas contra el Fòrum de les Cultures. En una de ellas se podía leer Me-Forro 2004. Según explicaron, el Ayuntamiento de Barcelona debería prestar más atención a la situación de los inmigrantes antes de invertir tanto dinero en un evento cuyo objetivo es el diálogo entre culturas.

Dos de los participantes en la marcha vestían a la manera del Ku Klux Klan, con túnica blanca y capirote, y en su indumentaria destacaba en negro la frase Ku Klux Clos. Uno de ellos explicó que el alcalde de Barcelona y la teniente de alcalde Imma Mayol actuaron como «racistas» al desalojar a los inmigrantes de las plazas de la ciudad.