Desde CGT León se quiere denunciar el desmantelamiento de la red de torres de vigilancia de incendios forestales en Castilla y León, y especialmente en la provincia de Burgos.

Hasta este año, la provincia contaba con una red de 29 torres de vigilancia operadas por Vigilantes de Incendios en Época de Peligro Medio y Alto de incendios forestales, realizando otras labores en el medio natural el resto del año.

Por Resolución de la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal (DGPN) de la Consejería de Medio Ambiente, se ha decidido que en el año 2025 la reorganización de los puestos de vigilancia del Operativo INFOCAL queda del siguiente modo:

En la provincia de Burgos quedarían solamente 15 torres de vigilancia, operadas por una adscripción única de 2 vigilantes de incendios por puesto, eliminando por tanto 14 torres de vigilancia.

La intención de la DGPN es sustituir dichos puestos por cámaras que han demostrado sobradamente su ineficacia en más de 10 años de pruebas, en los que no han detectado un solo incendio de manera autónoma.

Justifica su decisión en que el sistema de vigilancia basado en personas es «ineficaz», y en que la mayoría de los avisos de incendios se reciben «a través de llamadas al 112». El análisis de estas estadísticas, claramente manipulado, no aclara que cuando un Vigilante de Incendios avisa de un incendio, se computa como un único aviso, y que las llamadas que a partir de entonces se reciban en el 112 para alertar de ese mismo incendio por parte de ciudadanos, se contabilizan como avisos independientes, con lo que estadísticamente, para un mismo incendio, se contabiliza un solo aviso realizado por la red de vigilancia, y decenas, o centenares, de «avisos del 112».

La irresponsable decisión de la DGPN de la Junta de Castilla y León, demuestra que no aprende de los errores cometidos en el Incendio de Losacio y Sierra de la Culebra, cuando el inicio del incendio no pudo ser comunicado a tiempo, por no tener cubiertos los puestos de vigilancia de incendios en aquel momento.

Es por todo ello, que desde CGT Burgos se exige que la Junta de Castilla y León rectifique, y mantenga íntegra la red de vigilancia operada por Vigilantes de Incendios, procediendo al llamamiento del personal fijo-discontinuo que las ocupa, para evitar las consecuencias catastróficas que ello puede tener en el Medio Natural, así como para evitar la destrucción de empleo público en la España vaciada.


Fuente: Sindicato Único CGT de Burgos