Los vehículos se encontraban parados en la puerta de carga y descarga de la sede del sindicato en la ciudad de València, donde, desde el inicio de la catástrofe, se han cargado y repartido productos de primera necesidad a las damnificadas
El pasado miércoles 27 de noviembre, dos vehículos de la Confederación General del Trabajo aparcados en la puerta trasera de la sede de su Federación Local (F.L.) en València – lugar en el que se realizan las cargas y descargas – han sido propuestos para sanción por parte de agentes de la Policía Local de València.
Dichos vehículos, según denuncian desde el sindicato libertario, estaban identificados con un cartel impreso en el que se podía leer en mayúsculas: “servicio de emergencias, reparto de productos de primera necesidad”; puesto que estos se encontraban realizando labores de carga de material para su posterior reparto en las zonas afectadas por la DANA,
“Había llegado a nuestros oídos que se iban a intensificar los controles hacia el personal voluntario que accede a las poblaciones afectadas – explica Juan Miguel Font, Secretario General de la F.L. de València – pero no esperábamos que fuese a golpe de multa, aunque parece que la policía es el único lenguaje que entiende y la única forma que conoce de tratar a la población”. “En la conciencia de quienes les dictan estas órdenes tan miserables quedará que alguien desista de hacer voluntariado por miedo a las multas y que la población deje de recibir esta ayuda tan necesaria, no sólo material sino también humana”, añade Miguel Rodríguez, Secretario de Acción Sindical de la F.L. de València.
Desde CGT han querido manifestar toda su repulsa hacia este tipo de actuaciones policiales que nada tienen que ver con el “supuesto servicio a la ciudadanía” bajo el que se justifican. Y concluyen: “En la conciencia del amo y en la de quien ejecuta sus órdenes, sin ni siquiera cuestionárselas, quedará este hecho tan despreciable”.
Fuente: Gabinete de Comunicación de la Confederación General del Trabajo del País Valenciano y Murcia