Ante la situación que la enseñanza pública de la comunidad Valenciana viene sufriendo con los sucesivos gobiernos del PP, queremos, como trabajadoras y trabajadores de la enseñanza, explicar las dificultades existentes, con el fin de haceros llegar información correcta y pedir vuestro apoyo.
Es posible que tengáis hijas/hijos en edad escolar, es posible igualmente que os haya llegado información “confusa”, “cruzada”…respecto a la materia de Educación para la Ciudadanía (EpC), y pese a que éste no es sino uno más de los problemas de la maltratada educación pública, si es ahora mismo, la piedra “angular” del conflicto.
EpC se constituyó como asignatura después de que el gobierno español, acordara con la Unión Europea la necesidad de “confluir en Europa” con una materia que recogiera el fundamento de los valores democráticos y las buenas prácticas de una futura ciudadanía más global, como ya existía en la inmensa mayoría de los países del entorno. España lo cumplió incorporándola en varios tramos del recorrido académico. Y así empezaron los conflictos. Primero a manos de la conferencia Episcopal Española que vió una potencial amenaza a su control ideológico, en la difusión de determinadas realidades de la sociedad española como por ejemplo el concepto de familia y matrimonio, la reivindicación de igualdad de las mujeres…. Después, y como consecuencia lógica, del partido que los apoyaba, el PP, que trasladó al Parlamento la polémica, generando una situación de tensión innecesaria hasta este momento.
EpC se implantó progresivamente en todas las CCAA, en unas, con dos horas, en otras, una hora… siempre dentro del marco de sus competencias, unas la incorporaron el curso pasado (2007-08) y la mayoría de las que gobernadas por el PP (incluida la nuestra) en la fecha tope del presente curso.
El gobierno valenciano, aprueba en las Cortes en 2007 el currículum de esta materia (decreto 112/2007) y para sorpresa de todo el mundo, el Presidente Camps se pronuncia acto seguido con la afirmación pública (de absoluta y propia invención) que esta materia será impartida en inglés. Lo que inicialmente fue tomado como un elemento más de la lucha política personal del Sr. Camps, se transformó en una orden que promulgaron en mayo del curso pasado y que además contemplaba la posibilidad que los padres y madres : 1º) se convirtieron en objetores a la materia en nombre de sus hijos, con lo cual no la cursarían (esta fue seguida por un porcentaje muy elevado de la enseñanza privada y privada concertada) 2º) la Opción “B” que representaba “la elección a la carta” por parte de los padres, de tres temas del temario que se convertirían en tres trabajos trimestrales sin cursar el currículum completo, y además, con la supervisión forzada del profesorado de la materia que pasaría a convertirse en “un invitado de piedra”. Esta posición, de sabotaje “democrático”, afortunadamente fue frenada por los tribunales tras la denuncia interpuesta por sindicatos y Ministerio de Educación (el gobierno central). Como no podía progresar por esta vía, el Consejero de Educación, Sr. Font de Mora, improvisó sobre la marcha y ya, en el mes de septiembre con el nuevo curso, una segunda orden que obligaba al profesorado de filosofía y historia (titulares de la materia) a compartir aula y docencia al alimón con el profesorado de inglés, haciendo la siguiente pantomima : El profesorado antes mencionado explicaba a su colega de inglés lo que debía decir y cómo, y acto seguido, y en inglés por supuesto, este lo “vehiculizaba” al alumnado…. Por supuesto que no se contaba con el nivel de inglés que una criatura tiene en 2º ESO, no se contaba que serían alumnos de otra lengua extranjera, que tuvieran necesidades educativas especiales…. Nada importaba con tal que la voluntad personal del Consejero y el Presidente se cumpliera. Este esperpento tomó dimensiones reales cuando el profesorado “desobediente” recibió la visita de los inspectores para controlar que se cumpliera la ley y amenazar de expediente a los que así no lo hicieran…. No venían a los centros a satisfacer ninguna otra necesidad pedagógica…
En este momentos tenemos dos compañeros apercibidos (paso previo del expediente) y una comunidad educativa, humillada, avergonzada y despreciada por la utilización de todo el sistema educativo valenciano al servicio de intereses personales : la desvalorización y desaparición en esta comunidad de EpC.
A partir de aquí, compañer@s, ya sabéis el porqué de las movilizaciones a las que os invitamos a participar.
(1) Comunidad Valenciana y no País porque la idea que inspira este término está secuestrada en estos momentos.
Fuente: CGT Alacant
