Este 19 de febrero, a las 18:00h en Plaza Portugalete de Valladolid, ha tenido lugar una concentración de apoyo a Pablo Hasél, legalizada por CGT y convocada también por muchos otros colectivos y organizaciones de Valladolid mediante la Plataforma por las Libertades de Valladolid. En ella, varios cientos de personas han reclamado la libertad de Pablo Hasél y la derogación de la Ley Mordaza, con energía y sin incidentes de ningún tipo, a pesar de los augurios de algunos medios de comunicación e incluso una convocatoria anónima procedente de la extrema derecha a contramanifestarse lo que ha creado un gran revuelo y confusión en torno a esta convocatoria, infundados a todas luces a la vista del desarrollo de la misma, como por otra parte es tónica habitual en todas y cada una de las programadas por las organizaciones hoy convocantes.
Aclarar las siguientes cuestiones:
Aclarar las siguientes cuestiones:
-El acto estaba comunicado a la Subdelegación del Gobierno por CGT, al igual que el realizado por la misma causa hace unos días. Así como otros dos que hemos realizado esta semana y de los que ningún medio de comunicación se ha hecho eco. Uno por los despidos en Frenos y Conjuntos y el otro por la dignidad y seguridad en la Educación Pública. Actos realizados todos para dar a conocer nuestra postura y lograr un desenlace de justicia para los afectados. Lo mismo sucede, por citar solo un ejemplo, con las últimas convocatorias de 1 de Mayo, muy multitudinarias y de las que ningún medio de comunicación de la ciudad se hizo eco año tras año.
-El de esta tarde ha sido un acto para reivindicar la libertad de expresión. Legalizado por CGT y secundado la Plataforma por las Libertades así como por infinidad de colectivos y asociaciones de Valladolid.
-No promovemos ni justificamos el uso de la violencia al final de nuestras convocatorias. Ni por parte de los asistentes ni por parte de las Fuerzas de Seguridad del Estado, como ha sucedido en otras ciudades.
-Consideramos que los poderes legislativo, ejecutivo y judicial, así como la prensa tienen la responsabilidad de velar por el libre ejercicio de la libertad de expresión. Si así fuera realmente, actos como el de hoy serían completamente innecesarios. Algo no funciona correctamente cuando nos vemos obligadas a reclamar derechos de «normalidad democrática» en actos de justa protesta como el de esta tarde en nuestra ciudad.
MANIFIESTO:
Gracias por vuestra asistencia, primero queremos leer estas palabras de Pablo Hasél, escritas una vez encarcelado:
«Sobre mi nueva condena: Se me ha condenado sin pruebas en un claro montaje policial por denunciar a un falso testigo que ayudó a la Guardia Urbana de Lleida a dar una paliza a un compañero por pegar carteles.
Por denunciarlo públicamente en mis redes sociales se presentó un día cerca de mi casa para agredirme y yo me defendí, como es lógico, hasta que nos separaron. Este mismo «testigo» amenazó con una pistola en plena calle a dos solidarios tras recriminarle su actitud de falso testimonio. Como siempre la denuncia que hicieron estos compañeros quedó archivada, este tipo camina armado por la calle con total impunidad y al que han condenado a dos años y medio de cárcel es a mí.
Es escandaloso que en el tercer día que paso en prisión, para tenerme mas años preso y desviar el debate sobre la libertad de expresión, salga esta condena. Esto es claramente una operación de estado» (PABLO HASEL).
Desde que entrara en vigor la llamada «Ley Mordaza», uno de los colectivos más perseguidos y criminalizados ha sido el de los artistas, especialmente el de cantantes y raperos que con la letra de sus canciones denuncian situaciones de injusticias, abusos de poder y corrupción, entre otras cuestiones. Pablo Hasel, acusado de tres delitos: injurias a la Corona, injurias a las instituciones del Estado y enaltecimiento del terrorismo, será el primer cantante al que encarcelarán por rapear, ejerciendo su derecho a la Libertad de Expresión, lo que los medios de comunicación ya difundieron como hechos probados. A pesar de ello, Pablo Hasel haciendo gala de su coherencia y convicción ha desechado la posibilidad de eludir la cárcel.
Consideramos inadmisible que se condene a cualquier persona por expresarse libremente a través de las redes sociales, de los medios de comunicación, de canciones o de poesías…
Reivindicamos, una vez más, la derogación de la «Ley Mordaza», la reforma del Código Penal y que se respete el derecho a la Libertad de Expresión.
¡Por la derogación de la «Ley Mordaza»!
¡Por el derecho a la Libertad de Expresión!
¡Pablo Hasel, LIBERTAD!
Fotos: Alejandro Romera
Fuente: CGT-Valladolid