Más de 100 personas han exigido en València, junto a la Confederación General del Trabajo, futuro para las 25.000 familias que se verán afectadas por el cierre de las plantas de Nissan en Catalunya.
Más de un centenar de personas entre delegados, afiliados y simpatizantes de la Confederación General del Trabajo han acudido a la concentración que la mañana del jueves 25 de junio se convocaba en València desde la organización anarcosindicalista para exigir un futuro para Nissan y las 25.000 familias que se verán afectadas por el cierre de sus plantas en Catalunya.
Más de un centenar de personas entre delegados, afiliados y simpatizantes de la Confederación General del Trabajo han acudido a la concentración que la mañana del jueves 25 de junio se convocaba en València desde la organización anarcosindicalista para exigir un futuro para Nissan y las 25.000 familias que se verán afectadas por el cierre de sus plantas en Catalunya. El lugar elegido para esta convocatoria ha sido el concesionario de la multinacional que se encuentra en la avenida Tres cruces nº36 y se enmarcaba dentro de una campaña organizada desde la Federación estatal de sindicatos de la industria Metalúrgica de CGT en la que se han realizado distintas acciones descentralizadas a lo largo y ancho del territorio.
A esta convocatoria han acudido militantes de CGT en Camp de Morvedre que han impulsado el Comité de Apoyo a Nissan en la comarca con “el objetivo de llevar a cabo acciones solidarias con la plantilla de Nissan y llegar al máximo número de personas y entidades que quieran mostrar su apoyo a los y las trabajadoras de Nissan en el Camp de Morvedre”.
CGT explica que “Nissan declara anualmente unos beneficios escandalosos a los que se suman infinitas bonificaciones fiscales y subvenciones”, siguen denunciando, desde la organización anarcosindicalista que la multinacional nipona ha recibido 180 millones de euros en ayudas directas durante los últimos de 10 años, inciden desde el sindicato que estas subvenciones son “a fondo perdido por parte de las diferentes administraciones, sin que en ninguna de ellas hayan exigido un plan de viabilidad y de futuro para que ese dinero público no cayera en saco roto”.
Desde la organización anarcosindicalista consideran necesario organizarse para conseguir un plan de industria para ofrecer trabajo, medios de producción socializados y futuro” y así “defender los puestos de trabajo y a los trabajadores”, además opinan que desde Nissan han elegido cerrar los centros de trabajo en España “porque lejos de proteger a los trabajadores, el Estatuto de los trabajadores, tras la última reforma laboral permite a los empresarios ejecutar Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) y despedirlos”.
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Fuente: Gabinete de Comunicación de CGT-PV y Murcia
