El trámite del Senado
El Pleno del Congreso de los Diputados ha aprobado esta mañana la reforma del Código Civil que permitirá el matrimonio entre parejas del mismo sexo. El proyecto de ley ha contado con 183 votos a favor y el rechazo del PP y de los cuatro diputados de Unió Democrática de Catalunya (en total, 136 noes). Sus socios de Convergencia sí lo han apoyado. También se ha producido seis abstenciones. El proyecto tiene ahora que pasar por el Senado y regresar al Congreso para su aprobación definitiva. Según las estimaciones del ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, antes del verano podrá haber en España bodas entre personas del mismo sexo.
El trámite del Senado
El Pleno del Congreso de los Diputados ha aprobado esta mañana la reforma del Código Civil que permitirá el matrimonio entre parejas del mismo sexo. El proyecto de ley ha contado con 183 votos a favor y el rechazo del PP y de los cuatro diputados de Unió Democrática de Catalunya (en total, 136 noes). Sus socios de Convergencia sí lo han apoyado. También se ha producido seis abstenciones. El proyecto tiene ahora que pasar por el Senado y regresar al Congreso para su aprobación definitiva. Según las estimaciones del ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, antes del verano podrá haber en España bodas entre personas del mismo sexo.
En el debate, seguido desde la tribuna numerosos miembros de colectivos homosexuales y lesbianas, López Aguilar ha defendido que el proyecto supera «las barreras de discriminación, muchas de profunda raíz histórica o atávica, que afectan a derechos y libertades y, de modo particular, a la extensión de la libre elección en la búsqueda de la felicidad, un derecho fundamental no escrito». Entre las filas del PP ha destacado el voto a favor del matrimonio homosexual de la ex ministra de Sanidad Celia Villalobos. Los grupos parlamentarios de CiU y del PNV dieron libertad de voto a sus diputados, pero sus portavoces han subrayado que la pluralidad de opiniones en ningún caso significa cuestionar la igualdad de derechos de las personas con una determinada orientación sexual.
Al conocerse el resultado de la votación, la tribuna de invitados ha estallado en aplausos y se han puesto en pie los miembros de las asociaciones de homosexuales, entre ellos el concejal socialista y secretario de Movimientos Sociales del PSOE, Pedro Zerolo, y la presidenta de la Federación de Gays y Lesbiana, Beatriz Jiménez. Al final de la sesión, todos ellos se han fotografiado junto al ministro de Justicia y numerosos diputados en las escalinatas del Congreso entre gritos de igualdad. En su intervención, la diputada socialista Carmen Montón, encargada de defender el proyecto del Gobierno, ha explicado que la ley es un homenaje a las personas que «estuvieron, están y estarán» en esta lucha contra la discriminación, y ha añadido que la reforma es «sencilla, pero de una enorme trascendencia para la igualdad».
Cambiar «marido y mujer» por «cónyuges»
La modificación del Código Civil, que ahora sigue su trámite parlamentario en el Senado, consiste básicamente en sustituir en uno de sus artículos las palabras «marido y mujer» por «los cónyuges». Con esta ley, según Montón, los homosexuales tendrán el derecho de casarse, formar una familia y «disfrutar de los mismos derechos que el resto». En respuesta a la petición de más diálogo por parte del PP, Montón ha indicado que en realidad «quieren mutilar la ley, mutilar la igualdad, todas sus enmiendas son negativas, de supresión, no construyen nada». El fin del PP es «seguir impidiendo esta modificación y mantener la discriminación, con su postura de negación enraizan la injusticia», ha subrayado Montón, aplaudida por los colectivos homosexuales, a los que ha llamado la atención el presidente del Congreso, Manuel Marín.
Tras argumentar que no hay diferencias en la educación de un hijo crecido en una familia homosexual o heterosexual, ha manifestado que se acaba con la discriminación «formal o legal, pero aún queda la cotidiana». En su intervención, la diputada del PP Ana Torme ha acusado al PSOE de «haber aparcado» la posibilidad de alcanzar «un gran pacto social y político» a través de una regulación específica de parejas de hecho y, por contra, «ha elegido la vía más controvertida». «Han actuado como si el matrimonio fuese la única alternativa para acabar con la discriminación», sin embargo Alemania, Francia o Gran Bretaña han optado por las legislaciones de pareja de hecho. La figura jurídica para las uniones civiles estables también «es defendida por el informe del Consejo General del Poder Judicial y del Consejo de Estado o el alcalde de A Coruña, Francisco Vázquez (PSOE), que se opone a la adopción y al matrimonio homosexual», ha agregado Torme, que ha rechazado las acusaciones de homofobia lanzadas por el PSOE.
La diputada del PNV Margarita Uría ha explicado que la reforma es un avance en la consecución de los derechos civiles, «ahora bien es una materia en la que hay convicciones personales, sensibilidades e idearios, no necesariamente religiosos, por lo que hay libertad de voto». Por su parte, la diputada de CiU, Mercé Pigem, ha indicado que pese a las distintas posiciones en su grupo «hay una amplia coincidencia» en la supresión de las barreras hacia la igualdad, como muestra, por ejemplo, la aprobación de la ley de parejas de hecho en Cataluña. Por parte de Unió, Josep María Guinart ha defendido que el matrimonio es una institución exclusivamente heterosexual y ha aludido a las «dificultades» que entraña la adopción en el extranjero, ya que la mayoría de los países lo prohíben. La diputada de Izquierda Verde, Isaura Navarro, ha sentenciado que hoy es «un día fundamental porque es un paso hacia la igualdad».
El trámite del Senado
Una vez aprobado el texto en la Cámara Baja, el trámite en la Cámara Alta será mucho más complicado, ya que el PP está a sólo cuatro escaños de la mayoría, por lo que probablemente el proyecto será rechazo y devuelto al Congreso. Sin embargo, la amplia mayoría favorable de esta Cámara podrá levantar este veto sin dificultad de manera las parejas homosexuales podrán contraer matrimonio en España antes del verano.
Además, en el Senado podrán introducirse modificaciones. Tal y como ha explicado el ministro, si el Senado aprobara alguna enmienda el pleno del Congreso debería pronunciarse de nuevo. Si no lo hace, el texto aprobado hoy sería definitivamente ratificado en la Cámara Alta antes del fin del periodo de sesiones, en el mes de junio.
EL PAIS