Hace ya 1 año (31-3-2004), se suicido ahorcándose en un árbol en el barrio del Polvorín, nuestro compañero y conductor de Autobuses de Barcelona Pablo Díez, tras haberle sido entregada una carta de despido (30-3-2004), acusándole de apropiarse el importe de un billete,1’10 €.
Fueron necesarios 7 meses de lucha, incluidos dos días de huelga el 8 y 9 de mayo, manifestaciones, concentraciones… por parte de los trabajadores de autobuses para que la empresa reconociera en acta de conciliación en el Juzgado de lo Social Nº 7 la improcedencia del despido (26/10/2004)
Pese a reconocer la empresa su error en los juzgados, al asumir la improcedencia del despido, los directivos de TMB siguen siendo los mismos, ninguno ha dimitido ni ha sido cesado, nadie ha asumido ningún tipo de responsabilidad,
Para la CGT los directivos implicados en el caso hace tiempo que deberían de haber sido cesados, en especial Xavier Casas, presidente de TMB contra quien tenemos interpuesta una querella criminal, donde pedimos se le imputen los cargos de falsedad en la narración de los hechos acontecidos a resultas del despido y posterior suicidio del trabajador Pablo Diez, ya que según consta en el acta de la sesión plenaria de la (EMT), Xavier Casas, a las preguntas de los señores Riera y Jaume Ciurana, concellers de la EMT, afirmo refiriéndose a Pablo Díez que “..no es va fer l’acomiadament” “que aquest treballador no va ser acomiadat”(citas textuales del acta del Plenario).
Xavier Casas, faltó a la verdad, siendo una conducta tipificada en el Art. 390 punto 4 del Código Penal, delito castigado con las penas de prisión de 3 a 6 años, multa de 6 a 24 meses e inhabilitación especial por tiempo de 2 a 6 años, la autoridad o funcionario público que, en el ejercicio de sus funciones, cometa falsedad ; faltando a la verdad en la narración de los hechos. Si bien en un principio nuestra querella no fue admitida a tramite por un defecto de forma, el próximo día 14 de abril en el Juzgado de Instrucción nº 5 se verá el recurso puesto por CGT donde solicitamos vuelva a abrirse la causa judicial.
CGT no va a olvidar. Hay políticos que no saben asumir con dignidad sus errores, sobre todo cuando tienen consecuencias tan graves, tampoco saben rectificar. Los puntos del régimen disciplinario de la empresa que provocaron el fatal desenlace no han sido cambiados, no nos vale decir que se cambiaran en la nueva negociación de convenio, o que no se está aplicando el régimen disciplinario a rajatabla. Lo que esta escrito es lo que la empresa puede aplicar a su antojo y en cualquier momento. Apartados que provocan indefensión entre los trabajadores debieron ser retirados inmediatamente.
Saturnino Mercader
Oscar Mellado
Carlos Navarro