Compañeros CGT Internacional.

Reciban un fraterno saludo de los trabajadores de la empresa Biofilm S.A agrupados en el sindicato Sintrabiofilm.

Apreciamos su apoyo solidario, cuyo valor es fundamental para la clase. El internacionalismo proletario es el factor más importante para hacer frente a la explotación laboral y la precarización de la clase trabajadora. 

Al mismo tiempo, nuestros pueblos padecen el proceso sistemático de saqueo que impone el capital, a ultranza de los derechos de trabajadores y de las clases populares, agenciadas por los gobiernos de turno que aplican a diario el desmonte de la salud, educacion y servicios públicos, lo cual ahonda mucho más la grave crisis que nos hacen pagar a los obreros.

Biofilm S.A, es la única empresa en Colombia que fabrica película de polipropileno biorientado, que es el empaque que ustedes ven a diario en de alimentos como snaks, papitas, galletas, etc. Su naturaleza de multinacional exportadora la hace beneficiaria de los acuerdos de libre comercio con países como EE.UU, sin cumplir con los convenios firmados en favor de los trabajadores, una seria contradicción que evidencia la doble moral empresarial y estatal. 

Biofilm S.A, es la única empresa en Colombia que fabrica película de polipropileno biorientado, que es el empaque que ustedes ven a diario en de alimentos como snaks, papitas, galletas, etc. Su naturaleza de multinacional exportadora la hace beneficiaria de los acuerdos de libre comercio con países como EE.UU, sin cumplir con los convenios firmados en favor de los trabajadores, una seria contradicción que evidencia la doble moral empresarial y estatal. 

Pero el problema no radica solo en la negligente patronal de Biofilm, el asunto va más allá y toca las altas esferas de los grupos económicos del país, llegando a los dueños. Valorem S.A es el holding creado en 2004 por el grupo Santodomingo, cuya estirpe antisindical se ha dejado ver ‎con pruebas contundentes puestas de conocimiento por varios medios defensores de DDHH, donde se da cuenta del exterminio sindical de Sintrabavaria en 2005.

Bajo estas circunstancias, los trabajadores seguimos resistiendo los embates de este grupo, que se niega a reconocer a la organización sindical como legítimo representante de los trabajadores, obstaculizando por ejemplo el derecho a la negociacion colectiva y consecuentemente el derecho de asociación sindical. La violacion constante de derechos fundamentales, tal como el debido proceso o la debilidad manifiesta, sigue manifestándose en despidos y sanciones disciplinarias exclusivas para trabajadores sindicalizados.

E‎n un país como Colombia donde defender derechos es una tarea peligrosa por la vocación asesina de varias esferas de poder, las mismas que se han ocupado en asesinar a más de 5000 lideres sindicales y sociales, resulta importante el apoyo internacional de los trabajadores. Nuestra organización no ha sido la excepción, pues en 2013 fuimos objeto de amenazas de muerte, sin que hasta la fecha se tenga informe de los autores de la mismas.

Esa es la realidad de los trabajadores en Colombia, donde todavía hay que esconderse para crear un sindicato. Mientras tanto no hay garantías para los trabajadores, ni el Ministerio del trabajo, ni la fiscalía son garantes del cumplimiento de las normas laborales, no existe poder intimidatorio a los empresarios que transgreden diariamente leyes y derechos‎. Sanciones que no pagan, resoluciones que no cumplen y en síntesis un estado incapaz de defender a la clase que produce la riqueza. 

Agradecemos su gesto y apoyo incondicional, así como el escalamiento de esta denuncia‎ a nivel internacional. 

Seguiremos estrechando nuestros lazos, tal como lo hemos venido haciendo. Ratificamos nuestro apoyo a sus causas y luchas de los trabajadores españoles. 

Un abrazo.

Daniel Polo Lidueña. 

Presidente