Hoy día 12 de mayo de 2014, los trabajadores de la Unidad de Reparto de Las Rozas de Madrid decidimos adherirnos a la huelga indefinida convocada por el Sindicato de CGT de Correos y Telégrafos con cuyas reivindicaciones coincidimos y cuyos efectos, derivados de los contenidos que provocaron dicha convocatoria, sufrimos.
Entendemos que, de aquellos, se derivan las actuales condiciones de trabajo que llevamos padeciendo continuadamente durante casi una década, hasta el día de hoy en el que se presenta este manifiesto.
Hemos contenido esta respuesta y la hemos aplazado durante este prolongado proceso abusivo de incremento incesante del volumen de trabajo, inasumible, instalando el trabajo a destajo y normalizándolo, como si todo el curso anual y cada uno de sus meses fueran de “campañas especiales”, como pudiera ser la navideña o algún tipo de proceso electoral, como el que actualmente vivimos.
Entendemos que, de aquellos, se derivan las actuales condiciones de trabajo que llevamos padeciendo continuadamente durante casi una década, hasta el día de hoy en el que se presenta este manifiesto.
Hemos contenido esta respuesta y la hemos aplazado durante este prolongado proceso abusivo de incremento incesante del volumen de trabajo, inasumible, instalando el trabajo a destajo y normalizándolo, como si todo el curso anual y cada uno de sus meses fueran de “campañas especiales”, como pudiera ser la navideña o algún tipo de proceso electoral, como el que actualmente vivimos.
Hemos sufrido la incesante eliminación de puestos de trabajo y el incremento de la eventualidad en esta unidad, oficiada finalmente por una restructuración, con la promesa de no tener que sufrir lo que nosotros conocemos como contingencias.
Llevamos sufriendo años la implantación de una disciplina interna en la unidad más propia de un régimen cuartelario que de un centro de trabajo y contemplando el trato muchas veces vejatorio que reciben los compañeros eventuales, aprovechando su precaria situación, todo ello promovido por la jefatura de esta empresa a nivel provincial y nacional, ya que sabemos que los compañeros de otras unidades también así la padecen.
Por si lo anterior, que describimos como una brutal, pero consentida tomadura de pelo, no fuera suficiente, hemos sufrido, no sólo una paralización de nuestro nivel adquisitivo con ridículas revisiones salariales, sino además, una rebaja salarial del 5% a nivel funcionarial, el robo de una paga extra y el secuestro de las cuotas empresariales a los “planes de jubilación”, procedentes de nuestra masa salarial.
Al robo y el secuestro económico, tenemos que incluir el de nuestros derechos, recogidos en el actual y todavía vigente convenio colectivo, por una interpretación discriminada, parcial, unilateral y despótica por parte de la dirección de esta empresa pública, que ha sido capaz de expoliar la nómina de una compañera, justificándolo por impuntualidades que no ha cometido.
Esta empresa pública recibe 39 millones de euros por la actual campaña electoral europea y quiere que mantengamos el insoportable ritmo a destajo por una propina de 0,062 céntimos la papeleta en el mejor de los casos y cuyo cobro no está garantizado si no cumplimos con el reparto del correo ordinario habitual, que nosotros sabemos inasumible y 90 euros de la campaña electoral, durante todo el año. No queremos sus propinas.
A lo más arriba descrito, debemos añadir, además, el descarado boicot que esta empresa está haciendo a la seguridad social, que todos pagamos, mediante el bloqueo de bajas por contingencias profesionales, derivándolas, en connivencia con las mutuas, a incapacidad transitoria, cargando a este organismo, con gastos que las mutuas deberían asumir. Bajas por ansiedad y depresión provocadas, en la mayoría de los casos, por el estres en nuestra constante lucha contra el reloj (cuando vean a una cartera/o sudando delante de un carro o en el suelo al lado de la moto este verano, acuérdense de lo que les decimos) y que son perseguidas como actos delictivos. Sin hablar de la inabordable cuestión de las irreconocidas enfermedades profesionales provocadas por los movimientos repetitivos.
POR TODO LO ANTERIOR, LOS TRABAJADORES DE LAS ROZAS EXIGIMOS:
1-ELIMINACIÓN DE LAS CONTINGENCIAS
2-REDIMENSIONAMIENTO ADECUADO DE TODAS LAS SECCIONES DE ESTA UNIDAD QUE SE TRADUZCA EN UN VOLUMEN DE TRABAJO ASUMIBLE Y REFUERZO DE LA PLANTILLA MEDIANTE CONTRATACIÓN FIJA Y NUEVAS SECCIONES. COMPROMISO POR ESCRITO, NO QUEREMOS MÁS TOMADURAS DE PELO.
3-TRATO DIGNO A TODOS LOS TRABAJADORES. LOS EMPLEADOS EVENTUALES DE CORREOS NOS SON TRABAJADORES DE SEGUNDA.
4-APLICACIÓN INTEGRAL DE NUESTROS DERECHOS COMO TRABAJADORES TANTO EN MATERIA LABORAL COMO DE SALUD.
5-REPARTO DEL TRABAJO. RETRIBUCIONES JUSTAS POR LAS CAMPAÑAS ESPECIALES Y AUMENTO DE LA CONTRATACIÓN EN DICHAS CAMPAÑAS.
CGT Correos Madrid
Fuente: CGT Correos Madrid