Cuando CGT estampó su firma en el II Convenio Colectivo porque se había llegado a un acuerdo de negociación colectiva que contenía nuestras reivindicaciones, lo hacíamos con la firme convicción de que la empresa sería la principal valedora de su cumplimiento, porque de ello depende en gran medida la estabilidad laboral en nuestra empresa en unos momentos tan difíciles.
No ha pasado ni un mes desde su firma cuando por medio de los hechos, nos vamos enterando que la empresa dice y firma una cosa y hace otra muy diferente. Nos referimos a las múltiples situaciones que se están generando por todo el territorio en las que se está planteando una posible creación de trabajadores excedentarios, con modificaciones funcionales y posibles situaciones de movilidad geográfica forzosa.
No ha pasado ni un mes desde su firma cuando por medio de los hechos, nos vamos enterando que la empresa dice y firma una cosa y hace otra muy diferente. Nos referimos a las múltiples situaciones que se están generando por todo el territorio en las que se está planteando una posible creación de trabajadores excedentarios, con modificaciones funcionales y posibles situaciones de movilidad geográfica forzosa.
Se están iniciando procesos de negociación de nuevos cuadros de servicio en las Terminales de la Dirección de Servicios Logísticos con planteamientos de pérdida efectiva de plantilla que en algunos casos es por debajo del nivel de existencias. Asimismo, se están produciendo determinados procesos no negociados de formación indebida para la asunción de cargas de trabajo en las dependencias motivado por la supresión de contratos de externalización de servicios, que hasta la fecha en muchos casos eran los que sostenían en mayor o menor medida la productividad de las terminales.
Asimismo, estos procesos son también extrapolables a los trabajadores de Infraestructura que están viendo como las intenciones más que sabidas de la empresa anuncian una clara agresión a las funciones del personal con asignación de funciones que no corresponden por normativa e incluso situaciones de movilidad y unificación de sectores que en muchos casos implicaría una clara movilidad forzosa geográfica, o también extensible para los trabajadores de Estaciones de Viajeros con la reordenación que pretenden para el canal de venta.
Ante esta actitud agresiva de la empresa que altera negativamente el clima laboral por el atentado que supone a las condiciones de los trabajadores, CGT se está posicionando en una postura claramente de apoyo y defensa de los intereses de los trabajadores, como siempre hemos venido haciendo, y por eso no vamos a dudar en poner en marcha los mecanismos habituales de lucha y reivindicación que sean necesarios.
Si la empresa se empeña en mantener esta actitud de agresión a los intereses de los trabajadores, en CGT no dudaremos, como siempre ha sido, en poner en marcha todas las actuaciones jurídicas y sindicales que estimemos necesarias incluyendo la oportuna comisión de conflictos, paso previo a las obligadas movilizaciones a las que nos aboca la empresa.
SFF-CGT
http://cgtcatalunya.cat/spip.php?article8518
Fuente: SFF-CGT