Felipe Ramírez es militante de la Federación Comunista Libertaria de Chile, organización que participa en la “red Anarquismo”. También milita en el Frente de Estudiantes Libertarios y actualmente es Secretario General de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile. Nos habla de su organización y de los planteamientos de ésta.

¿Cual es la situación actual de la Universidad en Chile?

¿Cual es la situación actual de la Universidad en Chile?

Para entender la situación de la educación en Chile hay que entender la profunda división de clases que existe en el país. En la educación superior tenemos tres sistemas paralelos. Tenemos el sistema de educación superior tradicional que reúne a las universidades estatales, a las universidades privadas, relacionadas sobretodo con la Iglesia católica, y con tres universidades privadas que son regionales que están ligadas normalmente a la masonería o algunos como le dicen notables o grupos de personas con plata de algunas unidades regionales. Los restantes sistemas son el tradicional de las universidades que existían hasta el año 81. También está el sistema de Universidades privadas, que surge tras el año 81, en plena dictadura. Y finalmente encontramos el sistema educativo técnico superior, que son centros de formación técnica, institutos profesionales que se encuentran ligados a grupos económicos nacionales o a grandes grupos económicos internacionales.

En la educación secundaria la situación es peor, tenemos 5 o 6 sistemas paralelos, tenemos una ecuación municipal y que depende de los pequeños municipios, sobretodo se encuentra en la capital, en las comunas de los sectores periféricos y de forma similar en regiones. Tenemos luego un sistema municipal pero que es “entrecomillas” de excelencia que esta ligado sobretodo a los liceos municipales que se encuentran en las comunas céntricas, en la comuna de Santiago, o en comunas ya más ligadas al sector Oriente que son las más pudientes y que seleccionan el ingreso, a través de algunas pruebas de selección de desempeño académico, y que van regulando de esa forma el ingreso de los estudiantes, porque muchos estudiantes de colegios municipales preferirían estar o muchos padres preferirían que estuvieran en esos colegios que “entrecomillas” son mejores. Además tenemos un sistema de liceos que son subvencionados por el estado, que son privados de inversiones privadas o de grupos económicos o de pequeños grupos de profesores que realizan una inversión y que son cada vez más, aumenta la matrícula y la existencia de esos colegios. Muchos dirigentes políticos de los partidos de centro izquierda, de la concertación de la socialdemocracia, están ligados a estos colegios, asimismo también muchos empresarios de la derecha y grupos católicos ultraconservadores como el Opus Dei.

Y finalmente tenemos el sector de colegios técnicos, que son colegios que el estado le entrega a organizaciones empresariales para que se generen ciertos niveles de capacitación básica que en realidad genera mano de obra barata y semicualificada. Todos son privados y están ligados a organizaciones empresariales o a la cámara chilena de la construcción o cosas por el estilo.

Tenemos pues, un sistema educativo altamente segregado donde el origen del estudiante condiciona en gran medida el establecimiento educacional donde le va a corresponder ir y además la prueba de selección universitaria la PCU y sus resultados tienen directa relación con el colegio al que asististe y a la realidad socio-económica de la familia. Es decir, a los estudiantes pobres les va mal en la PCU, no alcanzan los puntajes para entrar a las mejores universidades y terminan entrando o a universidades estatales regionales que se encuentran abandonadas por el estado o a universidades privadas que están divididas entre universidades privadas para ricos y universidades privadas para pobres o sencillamente a los centros de formación técnica; y la mayoría no entra a nada, sale de la educación secundaria y entra a trabajar.

Háblanos un poco de tu organización y de cuáles son sus objetivos.

El FEL, Frente de Estudiantes Libertarios, es una organización que nace el año 2003 en un congreso el día 21 de Mayo en Valparaíso, una ciudad costera, una organización que actualmente agrupa a compañeros de varias regiones del país entre Arica que es la ciudad más al Norte del país y la ciudad de Valdivia. Tiene alrededor de 200 o 250 militantes a nivel nacional y que cuenta con presencia en varias federaciones universitarias, y hoy en día es de una u otra manera uno de los referentes libertarios más grandes del país, que agrupa a mayor cantidad de gente, con un programa único discutido en las distintas regiones y refrendado en sus consejos orgánicos y que yo creo que en sus pocos años de existencia ha sido capaz de surgir, prácticamente de una pequeña coordinación de grupos de propaganda, una organización que hoy en día se encuentra haciendo política, disputando líneas políticas en el movimiento estudiantil y que además apuesta, sobretodo, además de esto, a establecer una unidad del movimiento estudiantil con los distintos sectores movilizados de la sociedad, principalmente organizaciones ligadas a la clase trabajadora, sindicatos de base…

¿Qué semejanzas y diferencias tiene con otros sindicatos de estudiantes u organizaciones estudiantiles?

Varias cosas: el FEL probablemente es una de las pocas organizaciones del movimiento estudiantil, de la izquierda del movimiento estudiantil, que tiene presencia nacional. Por lo general la izquierda en Chile a nivel universitario o estudiantil se encuentra muy segmentada. Con las capacidades nacionales que cuenta el FEL probablemente esté la Juventud Comunista, algún grupo trotskista y para de contar…ah, bueno y una organización marxista que es relativamente nueva que se llama Unión Nacional Estudiantil y que surge al calor de la movilización de 2011.

Las principales diferencias que yo creo que tiene el FEL son, por un lado su carácter libertario, la capacidad que tiene de generar discusiones políticas a nivel nacional, entre el conjunto de los estudiantes y entendiendo también que el FEL, como tal, como organización, no se define como anarquista ideológicamente hablando, se define como libertario en la medida en que los puntos que le entregan coherencia orgánica son ciertas formas de organización de democracia directa, horizontalidad, federalismo en su estructura interna, lo que le da coherencia política no es una línea ideológica sino un programa político. De esa manera quienes se acercan a la organización en gran medida son estudiantes que están de acuerdo con las posiciones políticas que “levanta el FEL” y no necesariamente se acercan debido a una convicción política, y esa convicción política por lo general se comienza a generar ya militando en la organización gracias al contacto con otras organizaciones, con la elaboración teórica libertaria, los cursos de formación que organiza la organización internamente, etcétera. Y yo creo que ese es un carácter que le entrega una particularidad bien importante, su capacidad de unidad y de trabajo, sobretodo con organizaciones sindicales. Probablemente la Juventud Comunista con su particularidad marxista-leninista es la única organización en Chile que puede establecer un nexo tan directo con organizaciones de la clase trabajadora.

Tenemos entendido que el movimiento anarquista ocupo una posición relevante durante la Revolución Pingüina, aquella de los estudiantes del 2006. ¿Es esto correcto? ¿Cómo fue?

En el año 2006 el FEL era una organización relativamente nueva, tenía casi 3 años de desarrollo y cierta influencia, participa de algunas de las primeras movilizaciones algunos de los compañeros del Liceo de Lota, una pequeña localidad minera de la zona de Concepción en la 8º región. Son los primeros estudiantes que se movilizan porque comienza el invierno y el Liceo se “llueve” y ellos publican un vídeo en Internet que llega a las noticias en que se ve cómo a través de las salas corren ríos, no tenían vidrios, hacía el frío propio de esa zona del país que es muy helado… condiciones indignas. Y ahí existían compañeros que participaban del FEL de secundaria y ese año durante toda la movilización las ideas libertarias, sobretodo a nivel de organización, permean mucho el movimiento secundario, más allá de que no haya habido una organización que con tanta fuerza las impulsara hace ya varios años: la necesidad de una asamblea, de que fuera la asamblea de base la que decidiera las políticas va siendo, cada vez más una nota normal. Y ese año lo que tiene es que los estudiantes secundarios con una movilización tan potente se organizan a través de una asamblea nacional de delegados, que con un poder bastante importante de las bases de los liceos para tomar las decisiones y amarrar a los voceros. De hecho algunos voceros ligados al partido socialista se retiran en mitad del proceso. En ese momento, de los voceros nacionales había uno que era muy cercano a un partido de la derecha chilena, había algunos ligados al partido de la concertación, al partido socialista. Había una chica que tenía cierta cercanía y que terminó militando en la democracia cristiana. Había ahí una variedad de cosas muy grande y me parece que la influencia libertaria se nota sobretodo en esa capacidad de que esas lógicas de organización permearan de manera tan rotunda.

¿Qué papel a desarrollado el movimiento libertario en general y la FEL en particular en las protestas estudiantiles de 2011?

El año pasado el FEL no contaba con compañeros a nivel de direcciones en las federaciones estudiantiles, así que la agitación y la participación se dio sobretodo a través de las asambleas de base. Me parece que el FEL en determinados momentos logró tener una buena influencia en la medida en que fue capaz de realizar una correcta interpretación del escenario en que le tocaba desenvolverse al movimiento. Me parece que tuvimos un acierto a la hora de plantear la necesidad de generar una vinculación mayor con los sindicatos como única forma de presionar al estado a realizar transformaciones fundamentales. Nosotros entendemos que ninguna transformación realmente estructural del sistema se va a poder realizar presionando solamente en el movimiento estudiantil que no afecta a la producción y me parece que por ahí nosotros logramos tener importantes aciertos sobretodo si eran a nivel local. Y esa apuesta por el trabajo en los distintos espacios en los que tenemos militancia, en las universidades, en las asambleas locales, fue lo que nos permitió finalmente empezar a disputar algunas direcciones. También cometimos evidentemente muchos errores, o sea, si hubiéramos hecho tan bien nuestro trabajo evidentemente quizás la movilización no hubiera terminado como terminó. Y ahí existe una autocrítica respecto a algunas incapacidades políticas que tuvimos, tanto a nivel orgánico de desenvolvimiento a nivel nacional, como de elaboración política y de capacidad de discusión en las mismas asambleas.

¿Qué relación mantenéis con otras organizaciones estudiantiles libertarias tanto a nivel estatal como internacional?

Como FEL a nivel nacional nosotros conversamos con la izquierda cuando haya que conversar. Conversamos con quien haya que conversar dependiendo de las necesidades que existan. Eso incluye conversar, conversar, no llegar a acuerdo, con organizaciones de derechas, con organizaciones de la Juventud Comunista, con organizaciones de la izquierda marxista, trotskista, etcétera. En ese sentido nosotros creemos que hay que entender que el debate político es político, no ideológico en este momento. En un momento en que el movimiento estudiantil o popular chileno se está reconstruyendo. Es necesario estar al tanto de lo que esta pasando en el resto de los sectores para poder tener una lectura correcta de lo que esta pasando. No tenemos alianzas políticas con otras organizaciones en este momento, pero sí existen canales abiertos de debate y nosotros no tenemos problema en debatir de política abiertamente con los otros sectores; estamos además muy seguros de nuestra posición. Por lo tanto para nosotros eso no es un problema.

En el movimiento anarquista chileno son pocas las organizaciones formales. Con organizaciones con las que tenemos más o menos una relación son con las organizaciones comunistas libertarias: la Federación Comunista Libertaria, la Organización Comunista Libertaria, algunas unidades de propaganda estética, principalmente unidades que realizan murales en las murallas, UMLEM en ese caso. Y con compañeros libertarios que participan de organizaciones sindicales.

A nivel internacional hay contactos informales más que nada. Con CGT hay una organización bastante formal, que nos ha ayudado en momentos en que nosotros le hemos solicitado ayuda, se ha participado en campañas de apoyo… Cuando ha habido algunas huelgas generales en España se han hecho actividades a las afueras de la embajada chilena, etcétera.

Con quienes estamos construyendo lazos orgánicos son con las organizaciones que nosotros entendemos que son hermanas, léase el Frente de Estudiantes libertarios de Argentina principalmente, que es una organización que surge muy al alero de la experiencia chilena, con quienes estamos tratando de desarrollar un intercambio de documentos orgánicos, políticos, para poder tener una relación más estrecha. Y bueno con organizaciones libertarias a nivel informal hay compañeros que han tenido intercambios con algunos sindicatos de Europa, con organizaciones de estudiantes. Así rápidamente me acuerdo de un comunicado del sindicato Sud de Francia, que envía un apoyo a una huelga en la que había militantes nuestros participando, militantes del FEL que también trabajan. Bueno CGT evidentemente. Hay compañeros que tienen algún contacto con gente de CNT España, con la alternativa libertaria de Francia…

¿Cuántos colectivos hay que se declaren anarquistas o anarcosindicalistas y qué peso tienen?

Colectivos anarcosindicalistas en Chile por lo que entiendo no existen. En general los compañeros participan de manera independiente en organizaciones sindicales o son militantes de las organizaciones digamos plataformistas. Colectivos anarquistas existen miles, por millones, colectivos de todas las índoles, agrupaciones que se sienten identificadas con los libertarios, que se reivindican con los anarquistas, hay de todo. Hay unos compañeros que andan por aquí que son de un grupo de estudio José Domingo Gómez Rojas que realizan una interesante tarea, hay compañeros de una productora audiovisual que se llama Sinapsis que han hecho trabajos de muy buena calidad, con los que en algunos momentos podemos tener diferencias políticas pero que entendemos que son eso, políticas, no personales. Y bueno, existen otras organizaciones anarquistas, por ejemplo la que en algún momento fue muy famosa la CRA: Corriente de Revolución Anarquista, hay un Frente Anarquista Organizado que es una organización también pequeña, colectivos estudiantiles, de chicos anarco-punks, etcétera.

¿Tienen relación entre ellos, están federados?

No, no que yo sepa no. Lo que yo entiendo es que entre esas iniciativas no existen mayores niveles de coordinación.

Entre los sindicatos de base ¿tampoco hay ninguno que funcione como anarcosindicalista aunque no reclame como tal?

No. Hay organizaciones donde compañeros nuestros, o sea compañeros de organizaciones comunistas libertarias tienen mucha influencia. Pero en general la política que nosotros hemos implementado, que las organizaciones tratan de implementar es que el sindicato es de clase, por lo tanto es de compañeros de distintas tendencias, pero son nuestros compañeros y son nuestras propuestas las que finalmente han ido permeando. Pero yo creo que sería un poco hablar demasiado decir que alguno funciona ya bajo una lógica anarcosindicalista. Yo creo que también además se lleva muy poco tiempo trabajando unos 4 o 5 años.

¿Que opinas de la violencia como herramienta reivindicativa?

Mira la violencia como bien lo dices es una herramienta, me parece que el movimiento popular chileno, hace muchos años ya, décadas, que asumió que existen contextos en los que la violencia se justifica y existen contextos en los que la violencia no se justifica. Parece que siempre que el estado reaccione con una represión, o sea cuando reprima el movimiento social, el movimiento social tiene el derecho de defenderse y defender a sus militantes y a sus miembros. El movimiento estudiantil chileno lo demostró muy claramente el año pasado. La fecha del 4 de Agosto fue una fecha muy importante para nosotros. En ese sentido la muerte de Manuel Gutiérrez la noche del 25 de agosto también. La muerte de militantes de organizaciones mapuches en el Sur también demuestra que nosotros nos enfrentamos a un estado que reprime masivamente a través de gases lacrimógenos, y otros efectos llamados disuasivos y que asesina cuando lo necesita hacer, bajo determinadas coyunturas de manera selectiva para enviar un mensaje. Frente a eso el movimiento social reacciona.

¿Nos puedes hablar del caso Bombas?

El caso Bombas fue un montaje judicial y político realizado por la fiscalía y el estado chileno en contra de una serie de compañeros ligados a casas okupas y algunos colectivos anarquistas acusándolos de la colocación de una serie de bombas, más de 100 que han explotado en Santiago sobretodo desde el año 2004. Fue una operación muy mediática en donde los allanamientos se realizan con cámaras de televisión de canales de la derecha fascista, de Megavisión en ese caso. Donde no se contaba con pruebas que permitieran inculpar de manera real a los detenidos de los hechos. Y que básicamente lo que buscaba era amedrentar, generar un chivo expiatorio que permitiera golpear a un movimiento social que en ese momento estaba en franca alza. Y los compañeros salen libres ya se monta el escenario que se había montado. Es lamentablemente, bueno, ya se había vivido el lamentable fallecimiento de Mauricio Morales mientras cargaba una bomba para instalarla en un local de gendarmería me parece. Y luego de eso el año 2011 durante un contexto de fuertes movilizaciones sociales, a Luciano Pitronello le estalla una bomba y pierde varios dedos. En este momento se encuentra en juicio. El estado yo creo que va también un poco a vengarse de eso, del revés tan grande que le significó fallar en toda esta operación judicial, de poder encarcelar a los inculpados del caso Bombas. Por suerte fue un caso muy mediático, el montaje era muy burdo, fueron de hecho abogados de bastante renombre los que participaron en su defensa también.

¿Quieres añadir alguna cosa más?

Yo creo que entendiendo mucho la particularidad del caso chileno de las manifestaciones estudiantiles que se desarrollan y sobretodo el papel que los libertarios están empezando a cumplir en los distintos movimientos populares y las distintas organizaciones sociales, me parece que sobretodo en instancias como esta, donde tanta gente se reúne, lo fundamental sobre todas las otras cosas es fortalecer los lazos, las relaciones, entre organizaciones, ente compañeros, el debate, el compartir posiciones, documentos de debate que nos permitan generar mayores claridades políticas, en general un fortalecimiento del anarquismo como alternativa real. Me parece que hoy en día lo que está más claro que nunca es que en los países en donde el movimiento libertario efectivamente tiene peso, esta cogiendo peso, o tiene organizaciones que realmente son importantes es donde se enfrascan en las luchas sociales, las luchas populares, con política, con posiciones reales. No con un discurso abstracto no entorno a ideales que está bien, que existen y no se puede hacer política sin ellos, pero no cambian el mundo, son palabras.

No, hay que darles forma

Claro, lo que cambia el mundo es la acción colectiva, es la organización y sobretodo es la política. Una acción colectiva, por más colectiva que sea y por más idealista que sea, si no tiene una funcionalidad política, si no tiene una racionalidad detrás, no construye.

Te queríamos preguntar por esta diferenciación que hacéis allí en Latinoamérica entre anarquista y libertario.

Yo tengo entendido que la mayor diferenciación, la diferenciación que nosotros hacemos en el FEL, esta diferenciación es un poco lo que te contaba antes, el FEL no es una organización anarquista como tal, no es una organización que se dota de unidad a partir de una confluencia ideológica, sino que es una organización que entiende a los libertarios y que entiende la unidad a partir de dinámicas organizativas, el federalismo externo, la democracia directa, la horizontalidad a la hora de dar discusiones políticas en el interior de la organización, pero en la que ser anarquista, el tener conocimientos ideológicos previos como debería ser en una organización anarquista, no existe. Si no que en general y un poco lo que se esta desarrollando sobretodo ahora luego de la movilización de 2011 son compañeros que se acercan a la organización, se acercan a nuestras posiciones políticas. También evidentemente es porque están de acuerdo políticamente y se quedan después porque les gusta y están de acuerdo con la forma de trabajo de la organización que evidentemente es libertaria evidentemente apuesta por el desarrollo de una alternativa comunista libertaria, anarquista, etcétera. Pero es de entender que el FEL no se entiende ni como una organización específica, ni se entiende como una organización social. Se entiende como una organización político-social y que si es un invento en general que se maneja en América latina que es la organización de tendencias que reúne a compañeros que se sienten identificados con las ideas libertarias, que se sienten identificados con la elaboración de un proyecto, de un programa político concreto, pero que no tiene esta unidad ideológica que si tiene la organización específica y que tiene un perfil político claro, es decir que un marxista-leninista no va a militar en el FEL.

 


Fuente: RyN Digital