En la inmensa mayoría de territorios del Estado, estamos asistiendo a una continuada degradación de la educación pública como derecho social y de nuestras condiciones laborales como trabajadores y trabajadoras.
En el primer aspecto, la mayoría de gobiernos autonómicos han procedido a una drástica reducción (amparada en la crisis) de aspectos que constituían una mejora de la calidad:
En el primer aspecto, la mayoría de gobiernos autonómicos han procedido a una drástica reducción (amparada en la crisis) de aspectos que constituían una mejora de la calidad:
- Dotaciones directas a los centros para su funcionamiento, formación del profesorado, servicios educativos y centros de profesores, programas diversos (innovación tecnológica, ordenadores para alumnos/as, conciliación y resolución de conflictos, reciclaje de libros…), becas de libros y comedor, personal de administración y servicios, personal de apoyo (técnicos/as de educación infantil, técnicos/as de inserción social, equipos de asistencia psicopedagógica…) substituciones del personal de administración y servicios y del personal de apoyo …
En cuanto a los derechos y condiciones laborales de quienes trabajamos para la escuela pública, los gobiernos central y autonómicos han introducido evidentes elementos de empeoramiento:
- Reducción salarial (entre el 5 y el 7%) desde el segundo semestre del año pasado, reducción salarial (todas las mensualidades y las pagas extras con reducción respecto al primer semestre de 2010) y aumento de la pérdida de capacidad adquisitiva en el presente año.
- Pérdida de las condiciones de jubilación anticipada a los 60 años (la nueva normativa, aún no publicada, sin duda seguirá la línea marcada por la reforma de las pensiones –pactada por UGT y CCOO- a nivel general aumentado a partir de 2013 la edad de jubilación anticipada y se eliminan las gratificaciones extraordinarias por tener 28 o más años de servicio)
- Aumento casi generalizado de la carga lectiva: más horas directas de clase –a pesar de que trabajamos en el Estado de la OCDE que ya tenía el horario lectivo más amplio- y, como consecuencia, mayor carga de trabajo -preparación, corrección, evaluación-. Estos aumentos van desde la hora más en infantil, primaria y secundaria en Catalunya, a las 3 horas de más en infantil y primaria en Galicia, pasando por las 2 de más en secundaria en Madrid.
- Mayor masificación en las aulas, debida tanto a la reducción de las plantillas como a la vulneración de las ratios establecidas por ley o a las estrictas normativas para la creación de grupos clase –especialmente en secundaria: bachilleratos, ciclos formativos…-
- Reducción de los refuerzos, desdoblamientos, horas B, atenciones individualizadas, aulas de acogida…
- Reducción considerable de las plantillas: debemos tener en cuenta que entre 18 y 20 horas lectivas más en secundaria suponen un profesor o profesora de menos y que entre 23 y 25 horas lectivas más en infantil y primaria suponen una maestra o maestro menos. Se calcula entre 12.000 y 15.000 maestros/as y profesores/as (según se vayan concretando algunas medidas), entre los/as expulsados/as del sistema y los/as no contratados/as a pesar del aumento de alumnos y alumnas,
- Empeoramiento de las condiciones generales, como consecuencia de la reducción de plantillas: funcionarios y funcionarias de carrera que han perdido su plaza definitiva; funcionarios y funcionarias con destino provisional que siguen un año más en tal situación; ha habido menos plazas de oposiciones y, por tanto, menos funcionarios en prácticas; y, por último, el profesorado interino y substituto sufre la mayor degradación al ver drásticamente reducidas sus posibilidades de trabajar y, en caso de conseguirlo, en peores condiciones (menos tiempo y más lejos)
- Mayor precarización del profesorado interino: nombramientos telemáticos, substituciones de 1/3 de jornada, mayor disponibilidad geográfica y funcional…
Darle la vuelta a este dantesco panorama es el objetivo de manifestarnos y defender día a día nuestros derechos y los de toda la población.
Secretaria General de Enseñanza CGT