Con fecha de 19 de julio ha tenido lugar una nueva reunión con motivo del ERE anunciado por la empresa. Nada más comenzar la reunión ha surgido un incidente que queremos resaltar: CCOO y UGT se han negado a que CGT hiciera constar en el acta del día anterior, que nuestro sindicato no cobra cantidad alguna por participar en estas reuniones.
Dicho de otra forma, estos sindicatos, en vez de
manifestar que ellos tampoco cobran por negociar, han impedido que otros
dejemos constancia de nuestro rechazo a lucrarnos por defender los derechos de
los trabajadores. Esa es la diferencia entre unos y otros, que ya todo el mundo
conoce en el ámbito sindical, y que marca la diferencia entre el sindicalismo
honesto y el repugnante.
En consecuencia, CGT no va a firmar acta alguna,
pues nadie nos va imponer lo que tenemos que decir y lo que no.
Dicho de otra forma, estos sindicatos, en vez de
manifestar que ellos tampoco cobran por negociar, han impedido que otros
dejemos constancia de nuestro rechazo a lucrarnos por defender los derechos de
los trabajadores. Esa es la diferencia entre unos y otros, que ya todo el mundo
conoce en el ámbito sindical, y que marca la diferencia entre el sindicalismo
honesto y el repugnante.
En consecuencia, CGT no va a firmar acta alguna,
pues nadie nos va imponer lo que tenemos que decir y lo que no.
El resto de la reunión, prácticamente ha versado
sobre la voluntariedad del ERE, pues según exista o no, condiciona la
aceptación de las medidas que se proponen.
En relación con la prejubilaciones, si la empresa se
reserva el derecho de aceptar o rechazar las solicitudes, en realidad no habría
voluntariedad, pues sería ella la que establecería unilateralmente quien puede
acceder a ella. Es lo que la empresa pretende, bajo la engañosa denominación de
“voluntariedad de doble sentido”. Por el momento CGT es el único sindicato que
se opone a ello, y mantenemos que deben de establecerse unos criterios
previamente fijados (combinación de edad, antigüedad, posibilidad de reubicación
etc.), y en base a ellos establecerse un orden que la empresa no se pueda
saltar.
Y en relación con las bajas incentivadas, el tema adquiere una
mucha mayor relevancia y gravedad. De haber voluntariedad, las bajas sí podrían
calificarse de incentivadas, pero de no haberla realmente serían despidos.
Y CGT se opone, y actuará contra los despidos.
La empresa dice que habrá una voluntariedad para
causar baja, y a CCOO y UGT parece bastarles eso. Para CGT no es suficiente
una mera declaración en un acuerdo, y exigimos garantías concretas. Llevamos años viendo cómo
se acosa, hostiga, discrimina, margina, traslada, etc., etc., a trabajadores
para que abandonen la empresa, y como no se respetan los derechos laborales
para conseguir esa finalidad. Quien no crea lo que decimos, sólo tiene que
preguntar a alguno de los que han sido despedidos con anterioridad o llamados al
Departamento de Relaciones Laborales. Y si aún alguien no se lo cree, nosotros
podemos aportarle numerosas sentencias judiciales, y resoluciones de la
Inspección de Trabajo, que lo han constatado.
Así las cosas, el asesor de la empresa en las
reuniones (perteneciente al bufete de Clifford Chance) insiste hasta la saciedad
para que creamos en la buena intención de la empresa, y para ello se atiene
meticulosamente a su guión.
Pero afortunadamente, la verdad siempre sale
relucir. En esta ocasión, cuando la reunión estaba a punto de concluir, y
prácticamente sin venir a cuento, el representante de la Dirección de Citibank
allí presente, D. José Alberto Pascual (Dpto. de Legal), solo se le ocurre
manifestar que “no
es que sobren 200 trabajadores en el conjunto de la empresa, sino que se han
identificado ciertas áreas en las que sobra personal, entre ellas Banca de
Retail y sucursales”.
Descomunal declaración, que implica lo siguiente:
1. Nos están diciendo que
van a respetar la voluntariedad en las bajas incentivadas, pero lo cierto es
que la empresa previamente tiene una lista altamente perfilada de los
trabajadores de los que se quiere desprender.
2. Ha dejado en total evidencia, y al descubierto, a los responsables de
esas áreas, que han tenido conocimiento y han participado en la elaboración de
esas listas.
3. Para justificar el ERE, dicen
que si esta reestructuración les sale bien hay posibilidades de que nos saquen
de Citiholding, el basurero del grupo, cuando en realidad lo que pretenden es reducir
al máximo (eliminar) la poca actividad de banca minorista que realizamos.
4. Sabiendo esto, si CCOO y UGT dan
su visto bueno al ERE, serán cómplices, y por tanto responsables, de una oleada
de despidos que no tienen justificación.
En definitiva, tal declaración lleva a la conclusión de
que este ERE es una MENTIRA, no tiene justificación, ni coherencia, ni ética, y cuya
única finalidad es abaratar costes para que los de siempre, con la ayuda de sus
sindicatos colaboradores, sigan manteniendo sus prebendas.
Finalmente cuando se dio por terminada la reunión, la
empresa, CCOO y UGT, esperaron a que la representación de CGT abandonásemos la
sala, para seguir “negociando” ellos.
A buen entendedor no hacen falta más palabras.
20 de Julio de 2011
ERE en Citibank =
Tráfico de empleo
CGT SECCIONES SINDICALES EN CITIGROUP
