Las condiciones extremas de los once compañeros de ICMA SA (Grupo Ruffini) afiliados a CGT, que desde junio están sobreviviendo a una situación precaria no entrevé un final inmediato, todo lo contrario, …
…
guareciéndose la dirección de la empresa ante el amparo que las Administraciones Públicas ponen a disposición, presentan recurso de alzada ante la nulidad dictaminada por el Departament de Treball en fecha de 24 de julio. Única y exclusivamente para alargar, recrudecer y socavar el ánimo de once padres de familia cuya afiliación y militancia a un sindicato no afín a los intereses empresariales de destrucción de empleo y no adormecido en su conciencia como clase trabajadora, está padeciendo. Esta lucha no es solamente la lucha de unos individuos por sus intereses económico laborales, es el tributo a la dignidad hacia la clase trabajadora, es el legado pedagógico hacia nuestros hijos.
La estrategia destructiva premeditada por parte del Grupo Ruffini durante estos últimos meses no tiene parangón respecto a empresas del mismo sector. Mientras en unas están estableciendo políticas de viabilidad dentro del mercado amparadas por las Ayudas de Planes Estratégicos Sectoriales, Programas de Investigación y Desarrollo etc.… el Grupo Ruffini beneficiario de las mismas durante los últimos años, y de las que recientemente han percibido (Fuentes : La Vanguardia y La Razón.21 de julio de 2009), las refinancia en despidos del personal cualificado de sus empresas.
Esta situación que incomprensiblemente la sociedad hemos asimilado como normal, sería tal, si no hubiese sido precedida por un agresión gratuita inculcada por parte del Grupo Ruffini hacia nuestros compañeros de CGT. Nos encontramos con el trágico y anónimo tributo que pagan los trabajadores por intentar ganarse la vida enriqueciendo a empresarios sin escrúpulos. Pero no satisfechos con su despotismo e impasibles a las necesidades elementales de cualquier ser humano, presentan y se sostienen en una falsedad documental como causa del despido : la “extinción de contrato autorizada en ERE o por auto judicial o constatada por la Autoridad Laboral en cooperativas” (1698/09). Abocándonos a la desesperación más absoluta que como individuos jamás nos hemos afrontado, a fecha de hoy (18 de septiembre de 2009) no podemos percibir nuestro derecho al paro, algunos después de casi 40 años de cotización.
Y la Administración, ¿Qué hace ?, ¿Qué dicen ?, solamente indignarse con esta frustrante y kafkiana situación, pero desbordada por la saturación de sus instancias provocada por la patronal y consentida por nuestros políticos y sin medios ni instrumentos de articulación para responder in situ a las necesidades de los que sustentamos esta quimérica democracia, se ve incapacitada de autorizar en un breve plazo el Derecho a la Prestación de Desempleo.
En esta realidad no sirven las comprensiones ni las declaraciones de buenas intenciones por parte de las instituciones y las administraciones públicas, con ellas no satisfacemos las carestías de los nuestros. Nos pedirán calma y prudencia, pero después de 3 meses sin percibir ingreso alguno la delicada línea que separa la cordura de la locura empieza a confundirse, en los ojos se refleja la mezcla de la resignación, la rabia y la impotencia del trabajador marginado.
¿Cuánto y hasta dónde consideramos que está el límite de estas personas ? Si perdiésemos el Norte en este proceso, ¿Seríamos los verdaderos culpables, después de agotar los lentos recursos dispuestos por la Administración ? ¿Quién de las dos partes actoras es la sediciosa ? La que ha demostrado a un Inspector mediante contrainforme que el Grupo Ruffini aporta falsedad documental en sus despidos, e informando que están perpetrando un perjuicio gratuito para estrangularnos económicamente, o la Empresa que con sus políticas agresivas le ha llevado a amortizar las inversiones en tiempos récord, haciendo que las mejoras productivas se han implantado sólo si respondían a rápidas amortizaciones.
¿Y ahora qué ? cuando dejan de ingresar las cantidades ingentes de dinero a las que estaban habituados, saldan la circunstancial situación de mercado con el núcleo puro y duro de compañeros de la CGT. Nunca tendrá otra oportunidad la Dirección de Empresa de configurar una plantilla complaciente a sus políticas, dentro de este adulterado contexto.
Esperemos que las Administraciones y las Autoridades laborales competentes, puedan frenar esta lógica y realicen las intervenciones necesarias en este humillante proceso, y evite con las Ayudas a Planes Estratégicos al Sector, de I+D inexistentes entregadas a los empresarios de grandes empresas, porque están subvencionando con el erario público el Terrorismo Empresarial que venimos a denunciar.
Queremos agradecer de antemano el apoyo y respaldo económico y social manifestado por las Secciones Sindicales de CGT ante la deliberada y humillante agresión perpetrada hacia 12 trabajadores y sus respectivas familias. Nuestro reconocimiento se basará en la denuncia y la lucha contra el Grupo Ruffini por la persecución sindical hacia la CGT que están llevando a cabo.
Amado Torrico Jiménez
Delegado Sección Sindical CGT ICMA SA
Fuente: SS CGT ICMA SA