CGT valoramos positivamente que se den las condiciones ideales de temperatura para trabajar en el CAM, aunque continuamos exigiendo que entreguen a los trabajadores la ropa adecuada como pide la Inspección de Trabajo. También consideramos que se deben de realizar una nueva toma de temperaturas dentro de dos días cuando el centro haya reiniciado la actividad real que en el mismo se realiza, ya que las temperaturas de hoy, han sido las que han sido, por que el local se estaba calentando desde ayer sin parar. Exigimos que se mantengan esas temperaturas cuando se abran las zonas de carga y descarga.
CGT avisamos que las 16 maquinas de calor son alquiladas con el consiguiente riesgo de que puedan ser retiradas en cuando la empresa considere que ya no son necesarias.
CGT avisamos que al igual que en invierno las temperaturas son cercanas a los 0 grados, en verano se llega a temperaturas de 40- 43 grados en el interior de la nave, ya que las paredes y el techo son de chapa, pudiéndose repetir el cierre del centro en caso de que no se busque una solución definitiva tanto para el invierno como para el verano.
CGT consideramos que es una vergüenza que se haya producido un perjuicio a los clientes de correos, con retrasos en sus envíos de hasta 6 no habiendo tomado medidas logísticas hasta el 5º día después del cierre. En el CAM se mueven unos 60.000 paquetes al día y unos 2.000.000 de envíos diarios, tipo revistas, de grandes clientes.
CGT consideramos lamentable el poco respeto para la salud y seguridad de los trabajadores por parte de Correos, que a pesar de varias multas y requerimientos de Inspección, no toma medidas para corregir los problemas que surgen en un centro abierto y con actividad desde agosto de 1998 y que ya tuvo problemas de frio en el primer invierno en 1999.
Mañana jueves por la mañana hay una reunión en Inspección de Trabajo, donde la empresa tendrá que explicar al Inspector y a los sindicatos las medidas tomadas.
CGT consideramos que, Manel Rey Director y máximo responsable de Correos en Catalunya, debe de ser cesado inmediatamente, ya que ha demostrado tener nula sensibilidad ante un problema, donde debería de haber primado su interés por la salud y seguridad de los trabajadores, no ha tenido capacidad de resolver un problema que se arrastra desde el año 1998. Ha dado órdenes verbales que ni siquiera a tenido la valentía de hacer por escrito asumiendo lo que ordenaba y que sabia que contravenía la legislación vigente, actuando con un estilo caciquil digno del siglo XIX.
CGT valoramos muy positivamente la actitud del Inspector Francisco Castillo, que en todo momento ha mantenido la postura de defender el cumplimiento de la legislación y la salud de los trabajadores.
Fuente: CGT Barcelona
