La empresa Bolexgolf tendrá que justificar ante la Junta de Andalucía que ha cumplido con las condiciones establecidas en la orden mediante la que recibió subvenciones por importe de 480.000 euros, y en el caso de no hacerlo tendrá que devolver los 350.000 euros ya percibidos según informaba a finales de octubre la Delegación del Gobierno andaluz en Málaga.
El Mundo publicaba el pasado 20 de octubre que Bolexgolf, dedicada al reciclaje de pelotas de golf, ha explotado a sus trabajadores, todos ellos minusválidos, a los que ha adeudado de forma sistemática las nóminas, los ha obligado a trabajar sin las correspondientes medidas de seguridad y ha despedido en el año que lleva en funcionamiento a una decena de ellos, entre los que se encuentran los miembros del comité de empresa.
La junta remitía ese mismo día un comunicado a El Mundo de Málaga en el que detallaba que las subvenciones concedidas a la empresa Bolexgolf, dedicada al reciclaje de bolas de golf, «son ayudas regladas que se adjudican conforme a los requisitos establecidos en la normativa».
Detalló que la citada empresa, como ya precisó este periódico, ha recibido subvenciones para la eliminación de barreras arquitectónicas dentro de la planta con la que cuenta en Casabermeja y para la creación de empleo, «sin que hasta la fecha haya prescrito el plazo que la empresa tiene para justificar que ha cumplido los términos exactos por los cuales les fueron concedidas las ayudas».
La Junta de Andalucía subrayó que la empresa «tendrá que justificar adecuadamente que ha cumplido con las condiciones establecidas en la orden de ayudas», y si no llega a hacerlo tendría que devolver las ayudas ya percibidas, cuya cuantía asciende a 350.000 euros, y no percibirá las que aún pueden estar pendientes. En cuanto a los conflictos laborales abiertos entre los empleados y la empresa, la Junta detalló que «deberá ser el Juzgado de lo Social quien lo resuelva».
Bolexgolf inició su andadura en noviembre de 2007, en un acto presidido por la actual delegada del Gobierno andaluz en Málaga y entonces delegada de Innovación, Ciencia y Empresa, María Gámez. Entonces, detalló el que fuera presidente del comité de empresa, Antonio Guillén Puertas, eran 22 trabajadores, todos ellos con algún tipo de minusvalía, tanto física como psíquica, y que llegaron a Bolexgolf a través de Fundosa, perteneciente a la Fundación ONCE.
Fuente: Leonor Cabrera (El Mundo)
