Luce Vigo, la única hija del realizador cinematográfico Jean Vigo, estuvo ayer en Barcelona para presentar una retrospectiva conmemorativa del centenario del nacimiento del cineasta, que se ha iniciado en la Filmoteca de Catalunya. La filmografía de Vigo es corta pero intensa : el largo L’ Atalante (1934), el mediometraje Zero en conduite (1933) y los documentales A propos de Nice (1929), una visión antiburguesa de Niza, y Taris ou la natation (1931), sobre un campeón de natación francés. Los filmes acaban de editarse en DVD.
Considerado uno de los estandartes del cine de autor europeo, rabiosamente independiente y personal, Jean Vigo nació en Béziers en 1905, vivió en Niza y falleció en 1934 en París, a los 29 años. Vigo fue representante de los copríncipes de Andorra.
Luce Vigo, que ha hecho hincapié en la admiración que su padre sentía por Luis Buñuel, a quien conoció en París, se quedó huérfana a una edad muy temprana de padre y madre. A los 14 años emprendió la recuperación de la memoria del cineasta gracias a amigos y colaboradores próximos como Pierre Merle, Charles Goldblatt, Henri Strorck, Albert Riera y Boris Kaufman, el director de fotografía de todos los filmes de Vigo.
«Amaba el cine y compartía las mismas pasiones que su equipo de colaboradores», señaló la hija del cineasta. Tras referirse a los orígenes catalanes de Vigo y de su primo Riera, a quien conoció en la Tour de Carol (Francia), Luce explicó que se siente «muy arraigada con la Cerdanya y el espíritu de libertad que siempre ha existido en Catalunya».
La Filmoteca abrió ayer la retrospectiva con Taris ou la natation, un documental muy plástico en cuyas imágenes conviven la exploración del cuerpo humano con la poética de Jean Cocteau., y Zero en conduite, historia de una rebelión infantil que tanto influyó en el Lindsay Anderson de If…. Ambas películas vuelven a proyectarse hoy.
La retrospectiva íntegra se completará el 8 y el 10 de septiembre con la exhibición en una misma sesión de A propos de Nice y L’Atalante (1924), exaltación de la pasión amorosa y la perspectiva anarquista en la que de un modo u otro fue educado el cineasta. La vida de Vigo estuvo marcada por el encarcelamiento de su padre, el anarquista Miguel Almereyda, su frágil salud y el rechazo de su obra.
Fuente: QUIM CASAS / El Periodico
