La CGT considera irresponsable la política de formación desarrollada por la Dirección de la empresa para la habilitación de trabajadores en la conducción de trenes y anuncia que actuará personalmente contra los responsables en caso de accidente o incidente que pueda ser consecuencia de la escasa formación recibida por el trabajador.
Después de los antecedentes del verano pasado con multitud de incidentes, algunos de ellos graves como la circulación de un tren en sentido contrario en la estación de Bellvitge el 23 de Julio del 2004, la Dirección vuelve a recortar drásticamente, junto con una parte del Comité de Empresa, los tiempos de formación eliminando las pruebas de acceso para obtener la autorización necesaria para conducir. Esto se ve agravado por la urgencia que representa tener que habilitar a la conducción a un número aproximado de 800 trabajadores en los próximos meses como consecuencia de la aplicación del Nuevo Modelo Organizativo (N.M.O.), estos trabajadores están divididos entre los de nuevo ingreso para cubrir las vacaciones de verano y el actual personal de estaciones que siendo fijos en la Empresa NUNCA QUISIERON o por cuestiones médicas NO PUDIERON pasar (al no ser aptos) a la categoría de conductor.
Esta avalancha de despropósitos provoca serios problemas que podemos resumir en dos :
1. El tiempo de formación queda relegado a un máximo de 7 días (56 horas) de los cuales 2 días (16 horas) de aula que están dedicados a la “INTRODUCCION A LA CIRCULACIÓN”, donde únicamente se leen todas las características de los trenes, las normas de circulación, agujas, semáforos, seguridad, etc., pasando después y no necesariamente a continuación a las prácticas en el tren y en los talleres, donde en un máximo de 5 días tienen que aprender a conducir y a resolver averías. Nada que ver con la formación que se realizaba hasta antes del verano del 2004, que comenzaba con una prueba psicotécnica que había que superar, una revisión médica específica y continuaba con un mes de teoría en aula (unas 88 horas), después del cual también había un examen de asimilación de conocimientos que era obligatorio superar, quien no pasaba este proceso completo no podía ser conductor. A posteriori, venían las prácticas de conducción que eran impartidas por instructores con muchos años de experiencia (más de 5 años ) y que no tenían un límite de tiempo, era el instructor y el propio alumno quienes decidían cuando se estaba capacitado.
El proceso actual no recoge ninguna prueba (ni teórica ni práctica) que certifique la asimilación de los conocimientos por parte del trabajador, quedando la autorización definitiva en manos de la apreciación subjetiva de la empresa. Los Trabajadores están presionados ante la posibilidad de quedarse sin puesto de trabajo por lo tanto es hipócrita preguntarles al final si se ven en condiciones de llevar el tren. Hay que tener en cuenta que estos trabajadores, o están en periodo de prueba (los de nuevo ingreso) o no pudieron, o no quisieron o no estuvieron capacitados médicamente para ser conductores en su momento.
2. Las personas que dan la formación a los nuevos conductores :
La dirección y una parte del Comité de Empresa tienen el criterio de que cualquier trabajador que hoy conduce trenes está capacitado para impartir clases prácticas a los nuevos conductores, lo cual va contra toda lógica formativa. En estos momentos ya se están dando casos en los cuales los nuevos conductores se encuentran en las clases teóricas con la simple lectura de los manuales y reglamentos de forma mecánica y que cuando van a dar las prácticas son enseñados por personas cuya experiencia como conductor puede ser de días, ya que la dirección considera que al día siguiente de ser autorizado a conducir ya se esta capacitado para dar formación a otros trabajadores.
La gran mayoría de los conductores experimentados han rechazado dar prácticas por carecer de una titulación formativa específica, habiéndoles dado la razón Inspección de Trabajo en sus resoluciones.
Ante esta situación, que la CGT considera que puede ser grave, queremos manifestar :
1. Que con fecha 30 de Marzo denunció por vía de urgencia ante la Inspección de Trabajo los hechos estando todavía a la espera de que la Inspección actúe.
2. A pesar de intentar justificar con la tecnología estos modelos formativos, lo cierto es que hoy en día y durante muchos años (según reconoce la propia empresa), los trenes serán conducidos manualmente por el personal de conducción en las líneas 1, 3 y 4 de forma permanente y en las líneas 2, 5 y 11 de forma intermitente, por lo tanto creemos que mientras se conduzca como siempre, la formación para conducir debe ser la de siempre, cursillo de conductor con un mes de teoría en aula, pruebas de capacitación al acabar el cursillo y prácticas suficientes impartidas por personal capacitado y con experiencia en trenes, desde hace más de 20 años esta formación ha funcionado sin crear problemas. El año pasado se varió significativamente este sistema de formación y todos, excepto la Dirección, se asustaron con los resultados, este año todavía se ha reducido más.
3. Después de haber denunciado estos hechos internamente, legalmente ante Inspección de Trabajo y públicamente ante los medios de comunicación, la CGT ha hecho casi todo lo que se puede hacer, no obstante anunciamos que tomaremos las medidas legales a nuestro alcance contra los que entendemos tienen responsabilidad directa en caso de ocurrir incidentes/accidentes que puedan tener relación con los hechos aquí denunciados.
La CGT y los trabajadores mayoritariamente no nos vamos a hacer responsables de las consecuencias que puedan ocurrir por unas decisiones tomadas por la Dirección de forma irresponsable. Asimismo, nos resulta incomprensible que una parte del Comité de Empresa acepte este año lo mismo que en el 2004 denunciaron ante Inspección de Trabajo, cuando la conducción de trenes técnicamente no ha variado en absoluto.
SI OS INTERESA, NOS LLAMAIS POR TELEFONO Y OS PONEMOS A VUESTRA DISPOSICIÓN TANTO LAS DENUNCIAS DE CGT EN INSPECCIÓN DE TRABAJO COMO EL PROTOCOLO DE FORMACIÓN AL QUE LLEGARON LA EMPRESA Y PARTE DEL COMITÉ DE EMPRESA.
