Tres años después de que el Gobierno de Botsuana expulsara a los bosquimanos gana y gwi de sus tierras ancestrales, más de 200 bosquimanos han regresado a sus hogares a pesar de los esfuerzos por impedírselo, al tiempo que Botsuana se enfrenta a crecientes críticas reflejadas en la prensa internacional. Las expulsiones han recibido condenas en publicaciones como Los Angeles Times, Boston Globe, Seattle Times y la revista estadounidense Mother Jones.
Los Angeles Times califica el centro de reasentamiento de Nueva Xade de «lugar desolador» : «No hay melones silvestres ni raíces que recolectar en las proximidades, no hay trabajo, ni nada que hacer. Por la noche, los jóvenes vagan sin rumbo mientras en los bares resuena una música de sonido metálico distorsionado. Nueva Xade es un lugar donde la bebida puede dejar cicatrices». El corresponsal de Mother Jones, que también visitó Nueva Xade, encontró «calles repletas de basura y borrachos que deambulan», y una tasa de mortandad por VIH/SIDA que aumenta incesantemente. «Este es el lugar de la muerte», le dijo un bosquimano.
El Gobierno de Botsuana y De Beers han invertido enormes cantidades de dinero en contratar a la empresa internacional de relaciones públicas Hill and Knowlton para que les represente como defensa de las expulsiones.
El Director General de Survival Stephen Corry ha afirmado que «es increíble que el Gobierno de Botsuana aún alegue que los gana y gwi se trasladaron voluntariamente y que son felices viviendo en los centros de expulsión. Todo periodista independiente que ha visitado estos lugares regresa contando la misma historia de alcoholismo, desesperación, y la angustia de este pueblo por regresar a casa».