La construcción se ha convertido en un problema de considerable magnitud a tenor de las cifras que expusieron ayer los responsables de la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo durante la cumbre que se celebró en el Euskalduna de Bilbao.
El propio director de la Agencia Europea, Hans-Horst Konkolewsky, explicó que, « aunque los datos sobre accidentes en la Construcción se reducen cada año, estos empleados tienen el doble de probabilidades de sufrir un siniestro, hasta el punto de que tres trabajadores de la Unión Europea fallecen cada día en accidente laboral ».
En concreto, cerca de 1.200 trabajadores mueren cada año en las obras y más de 800.000 sufrieron accidentes que requirieron una baja laboral en el 2001. La construcción registra en los países de la UE el 20% de todos los siniestros laborales y dicho sector mueve cerca de 902.000 millones de euros al año, con casi 13 millones de trabajadores declarados.
En la inauguración de la Cumbre, el secretario de Estado de Empleo y Asuntos Sociales, Valeriano Gómez, explicó la situación peculiar de este sector en el Estado debido al repunte de los últimos diez años, de manera que en la actualidad la construcción aporta el 8% del VAB del volumen de la economía, ocupa a más del 12% del empleo total, a la vez que produce el 30% de la siniestralidad mortal laboral. Gómez dijo que este porcentaje de accidentes mortales se debe, entre otras razones propias de las características de dicha actividad como la peligrosidad del trabajo en altura, « al elevado porcentaje de contratación temporal, que casi duplica a la de otros sectores, así como a la multiplicación de los niveles de subcontratación ».
El consejero vasco de Empleo, Joseba Azkarraga, coincidió en que el coste material y, sobre todo humano, de los accidentes del sector es todavía demasiado elevado y en que es imprescindible desarrollar una labor preventiva y formativa.
J. Baeza Bilbao
Fuente :DEIA