El trabajador de origen argelino que resultó herido de gravedad el martes al ser golpeado por un montacargas en Sabiñánigo falleció la pasada madrugada en la UCI del hospital Miguel Servet, como consecuencia de un traumatismo craneoencefálico. El accidente que costó la vida a M.Z., de 31 años, se produjo precisamente durante su primer día de trabajo en la empresa Joaquín Fernández, subcontrata de la constructora principal Aracorvi que edificaba un bloque de viviendas.
Con esta víctima se eleva a doce la cifra de fallecidos por accidente laboral durante este año en Aragón. El pasado martes perdió la vida otro operario de la construcción en Cuarte de Huerva, cuando trabajaba en el interior de una zanja que no se encontraba debidamente entibada como marca la Ley de Prevención, según informaron fuentes cercanas a la investigación. Francisco Felipe Pérez, de 34 años y vecino de Calatorao, trabajaba para la empresa Construcciones Hermanos Peña cuando quedó sepultado en el interior de una zanja de tres metros de profundidad cuyas paredes no estaban protegidas por placas para evitar el derrumbe.
DENUNCIA DE LOS ACCIDENTES Ante las circunstancias en que se han producido las dos muertes, la Federación de Construcción (Fecoma) de CC OO-Aragón ha denunciado ambos casos ante la Fiscalía para que se investiguen las causas, se detecten las deficiencias en materia de seguridad que pudieran haberse producido y se depuren las responsabilidades correspondientes.
El sindicato UGT exigió asismo una «investigación rigurosa» por parte de la Inspección de Trabajo sobre las causas en que se produjero los dos accidentes laborales. Para José Manuel Solanas, director de Salud Laboral de UGT, el siniestro de Cuarte de Huerva se podría haber evitado si se hubieran tomado las medidas preventivas que rigen el reglamento.
En cuanto al accidente que costó la vida a otro trabajador en Sabiñánigo, Solanas explicó que el perfil del fallecido coincide con el de la mayor parte de los siniestros laborales que se produce en Aragón : «trabajador con contrato precario, sin una información específica sobre los riesgos a los que se enfrenta, perteneciente a una empresa subcontratada sin delegado de prevención, ni representación sindical. Características que desgraciadamente suelen coincidir en trabajadores inmigrantes». En este caso el desconocimiento de los riegos resulta evidente, ya que se encontraba en su primer día de trabajo en la empresa.
El dirigente de UGT mostró su pesar por el devenir de los acontecimientos que no hacen sino confirmar que «las estadísticas siguen cumpliéndose y en Aragón se produce una muerte en accidente laboral por semana». Para solucionar este problema, Solanas reivindicó un esfuerzo de las administraciones, los agentes sociales y los empresarios para impulsar la figura del delegado de Prevención Territorial, una medida que, para el dirigente sindical, permitiría rebajar la cuantiosa siniestralidad laboral.