las Fuerzas Armadas estadounidenses.Al menos 21 soldados estadounidenses destacados en Irak se quitaron la vida el año pasado, indicó ayer un responsable del área sanitaria del Pentágono, que destacó que ello hizo aumentar levemente la tasa de suicidios en las Fuerzas Armadas estadounidenses.
Esa tasa pasó de 11 por cada 100.000 soldados a 13,5, destacó el secretario adjunto de Defensa para las cuestiones de salud, William Winkenwerder. De los 21 suicidios verificados en Irak, 18 tuvieron lugar en el Ejército y los otros tres en otros servicios.
«No percibimos una tendencia que nos haga pensar que deberíamos hacer algo más —en términos de prevención—», subrayó, y agregó que entre 300 y 400 soldados fueron evacuados del país por razones de salud mental.
Winkenwerder afirmó que no disponía de cifras sobre el número total de soldados estacionados en Irak atendidos por síntomas de estrés, y precisó que el Ejército disponía de nueve equipos psiquiátricos en Irak y la Fuerza Aérea de otros dos.
Además, cada división, con entre 10.000 y 15.000 efectivos, dispone de un psiquiatra, un asistente social y un psicólogo. «Invertimos muchos recursos en el terreno para la salud mental. Pensamos que esto es útil, que hace la diferencia», indicó.