LOS TRABAJADORES/AS DE OPEL Y SUS EMPRESAS AUXILIARES POR ENCIMA DE TODO

Hasta hace unos años, el sector de la automoción en el Estado español era un claro ejemplo de estabilidad laboral, de salarios dignos, de condiciones laborales adecuadas… en definitiva, este sector era la punta de lanza del trabajo en el estado español. Todos los trabajadores y trabajadoras de las ciudades donde se encontraban las factorías, deseaban formar parte de sus plantillas.

Hasta hace unos años, el sector de la automoción en el Estado español era un claro ejemplo de estabilidad laboral, de salarios dignos, de condiciones laborales adecuadas… en definitiva, este sector era la punta de lanza del trabajo en el estado español. Todos los trabajadores y trabajadoras de las ciudades donde se encontraban las factorías, deseaban formar parte de sus plantillas.

Pero desde hace unos años (ya demasiados), estamos viendo como el chantaje, la pérdida de derechos, las reducciones salariales…son el día a día de los trabajadores y trabajadoras de las multinacionales del auto; retrocesos que también son sufridos por las plantillas de empresas auxiliares subcontratadas por estas.

Hace unos días veíamos como la plantilla de Opel y sus auxiliares se sumaban a la ya larga lista de empleados del sector amenazados con la pérdida de sus puestos de trabajo, tras la amenaza de la Dirección de su nueva propietaria (PSA), de no seguir produciendo el Opel Corsa en la factoría de Figueruelas (Zaragoza) si la representación sindical no aceptaba los numerosos retrocesos sociales, laborales y económicos, que la dirección ponía encima de la mesa de negociación del nuevo convenio.

Los compañeros y compañeras de Opel no tardaron en reaccionar a esta amenaza, y lo hicieron de la mejor manera posible, echándose a la calle y plantando cara a la dirección ante las puertas de la factoría. Desde la Federación del Metal de CGT estamos orgullosos de estos compañeros y compañeras, y les damos las gracias por ese empujón que están dando a la lucha de la clase obrera, que tan dormida está en los últimos tiempos.

Desde CGT no vamos a aceptar ningún tipo de chantaje ni amenaza, y vamos a estar en todo momento del lado de la plantilla de Opel, defendiendo sus puestos de trabajo y sus condiciones laborales ante quien sea y de la manera que sea.

La plantilla de Opel, al igual que la de sus empresas auxiliares, llevan muchos años sufriendo importantes retrocesos laborales, económicos y sociales, como para tener que soportar ahora una amenaza de este calibre.

Desde CGT vamos a seguir realizando llamamientos a la movilización tanto a la plantilla de Opel, como a la de todas las empresas auxiliares que trabajan para esta, y seguiremos denunciando públicamente la posición cínica y mezquina que ha tomado la nueva dirección de esta empresa, la cual está poniendo en peligro una de las principales potencias económicas y laborales de Zaragoza y Aragón. Desde CGT hacemos un llamamiento para que el resto de organizaciones sindicales hagan lo mismo y no cedan ante los chantajes y amenazas de la empresa, deseando no encontrarnos con situaciones tan desagradables como las que han sufrido compañeros y compañeras de otras fabricas del sector, donde en más de una ocasión hemos podido comprobar cómo algunos «sindicatos» cedían a los chantajes patronales, firmando retrocesos importantes para ellos.

¡¡LA LUCHA ES EL ÚNICO CAMINO!!

Miguel Fadrique Sanz

Secretario General FESIM (CGT-Metal)


Fuente: FESIM-CGT